En flagrancia, fue detenido por la Policía Ministerial Claudio Gilberto Vázquez, tras disparar su arma contra la camioneta de Jaime Rubén Torrecillas Hernández, a quien intentaba matar. Este sujeto contaba con dos órdenes de aprehensión, una por homicidio en grado de tentativa en contra de Jaime Rubén, y otra por lesiones en agravio de su esposa e hijo.
Este individuo, que fue aprehendido afuera del domicilio de Torrecillas Hernández, ubicado en la calle Alberto Terrones No. 405 de esta ciudad, trató de matar a éste nuevamente después de su fallido intento el 16 de diciembre de 2004.
Cabe recordar que el primer intento de asesinato se originó afuera de las oficinas de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas del Estado (Secope), ubicadas en el fraccionamiento Los Remedios. En esa ocasión Jaime Rubén recibió cuatro impactos de bala en el abdomen.
A pesar de su estado de salud, Jaime Rubén pudo identificar a Claudio Gilberto y lo denunció ante las autoridades ministeriales por intento de homicidio.
En su declaración, el presunto homicida trató de justificar su atraco argumentando que el agredido lo molestaba mucho y por eso lo intentaba matar.
Su esposa e hijo, Francisca del Carmen Lechuga y Javier Vázquez Lechuga, de 38 y 19 años de edad, respectivamente, habían puesto una denuncia ante la Dirección de Averiguaciones Previas después de ser lesionados a golpes.
El detenido fue puesto a disposición de las autoridades, ya que tiene pendientes dos órdenes de aprehensión, a las cuales se le suma el intento de homicidio del lunes por la tarde.
Capturan a cómplice de robos
La Policía Ministerial detuvo a uno de los cómplices de ladrones de tiendas de conveniencia; se trata de Manuel Serrano, de 43 años de edad, quien confesó ser compinche de los dos capturados el pasado 24 de enero.
A casi un mes de la aprehensión de dos sujetos que llevan por nombres Felipe Rodríguez Moya y Bibiana Salas, se detuvo a su cómplice que huyó después de asaltar a una de esas tiendas.
Confesó, al igual que en su momento lo hicieron Felipe y Bibiana, haber asaltado por lo menos a 15 de esos establecimientos, y agregó que el jefe de la banda era Felipe, ya que se quedaba con la mayoría del botín, pues el declarante se daba por bien pagado con unas botellas de alcohol, cigarros y algunas monedas para comprar alimentos.
Este sujeto, que reconoció su culpabilidad, se encuentra a disposición del agente del Ministerio Público de turno, quien determinará su situación legal.