Cabo Cañaveral (EEUU), (EFE).- La tripulación del transbordador Discovery se declaró lista para iniciar su misión, con lo que se reanudarán las operaciones de los transbordadores de Estados Unidos.
"Ha llegado el momento de volar", dijo la coronel de la Fuerza Aérea Eileen Collins, la primera mujer que comandará una misión de los transbordadores.
Estas fueron interrumpidas después del desastre del Columbia que el 1 de febrero de 2003 se cobró la vida de sus siete tripulantes.
Una investigación posterior reveló que la nave se desintegró al reingresar en la atmósfera debido a una perforación sufrida por su ala izquierda en el momento del lanzamiento, 16 días antes.
La suspensión ha retrasado las tareas de reconstrucción de la Estación Espacial Internacional (ISS) y obligado a reducir a sólo dos el número de sus inquilinos permanentes.
En una conversación con periodistas en el Centro Espacial Kennedy, los siete astronautas asignados a la misión prevista para mayo indicaron que los problemas técnicos que causaron ese accidente "son una cosa del pasado".
"Si no fuera seguro, no me subiría" al transbordador, aseguró Collins, quien dirigirá una tripulación de cinco hombres y una mujer.
"Además, se han realizado tantas pruebas que nuestra confianza está por los cielos", añadió.
Collins indicó que se han tomado medidas para impedir que se vuelvan a desprender las losetas de aislamiento, una de las cuales habría causado la perforación.
"Si eso ocurre, lo sabremos. En efecto, si hay un agujero muy pequeño también lo sabremos. Y para ello ya contamos con todas las técnicas de reparación", añadió.
Como último recurso, y en caso de que las reparaciones fueran inútiles, los astronautas pueden acudir a refugiarse en la ISS.
El grupo pasará 13 días en órbita para realizar lo que las autoridades de la NASA han calificado como una misión para hacer prácticas de inspección y ensayar técnicas de reparación desarrolladas desde el accidente del Columbia.
Para ello deberán realizar tres paseos espaciales o actividades extravehiculares (EVA) en las que utilizarán una especie de largo brazo en cuyo extremo habrá una cámara que les permitirá revisar toda la superficie de la nave.