EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- La amistad es la virtud que lleva a los individuos a una relación sólida, profunda, desinteresada y recíproca con otra persona.
Se basa en intereses y metas comunes y nunca se acaba sólo por circunstancias como el tiempo o la distancia, ya que trasciende y lleva a ambas partes a enriquecerse mutuamente, ayudarse a crecer como personas, desarrollar todas sus potencialidades y a superarse en la vivencia de la virtud.
Nace la amistad tanto de la natural necesidad de amar, como de una elección libre. Nadie puede elegir a la mayoría de personas que se tienen alrededor. Pero todos los seres humanos poseen la facultad de poder seleccionar a sus amigos.
El amigo es el hermano que uno elige libremente. Y la amistad, un acto personal de libertad y de amor, un diálogo habitual. Los amigos o amigas, cuando se encuentran de nuevo, se cuentan lo que ha pasado en ese intermedio, asumen ese período dentro de su diálogo, y lo continúan.
El rasgo más característico de la amistad es que busca la compañía del aliado, encuentra satisfacción con él: ?¿Qué cosa más dulce que el tener con quien te atrevas a hablar como contigo mismo??, dice una de las frases célebres de Cicerón.
Para comprobar que en Torreón todavía permanecen valores tan importantes como éste, acudimos a la Universidad Iberoamericana (UIA), donde captamos a varios grandes amigos compartiendo gratos momentos.
Se conocen desde hace cuatro años y desde entonces mantienen una divertida amistad, ellos son Carla Farias, Ale Sánchez y Maru Rodríguez: ?Somos super amigos?, comenta Maru. Siempre que están juntos el ambiente se llena de diversión.
Sobre la pregunta acerca de a quien consideran su mejor amigo, pues la respuesta fue obvia: ?Nosotros tres?.
Uno de los momentos que recordaron con más entusiasmo fue un viaje de estudios, al cual se fueron juntos durante un semestre y fue nada más y nada menos que a Argentina. ?Primero nuestra idea era viajar a Las Vegas, pero pues al final la mejor opción fue Argentina?.
También estaban por ahí Christian Mata y Any Montañez. Estas chicas comentaron que se conocieron desde que estaban cursando la secundaria en la Escuela Carlos Pereyra, entonces es una amistad de mucho tiempo atrás.
Any comentó que su grupo de mejores amigas está conformado por Paola Miranda, Olguita Villarreal, Susana Aparicio y Sofi de la Torre, mientras que Christian contestó: ?igual?.
Sobre alguna experiencia en especial que hayan vivido juntas, respondieron que no recuerdan algo en especial, ya que han pasado muchos momentos juntas.
Otro grupo de amigos que encontramos fue el integrado por Ana Rosa García de Alba Darwich, Sergio Antonio Corona y Miguel Orejel.
Ana Rosa y Miguel se conocen desde hace aproximadamente ocho años y hasta hoy son grandes amigos; Sergio se integró tiempo después. Entraron a estudiar a la Ibero y ahora los tres forman un divertido grupo que hasta tiene delimitado su espacio en el campus: una banquita en la que se reúnen en cada uno de los descansos, pues ahí han compartido muchas interminables y amenas pláticas de mil temas.
Como Ana Rosa y Miguel ya están próximos a graduarse, piensan dejar a Sergio encargado de ?la banquita de los recuerdos?. ?Ya nos vamos en diciembre, pero le vamos a dejar la banca a Sergio para no perder la tradición, y cuando él se vaya se la heredaremos a Pedrito?, comenta entre risas Miguel.
Este trio ha pasado muchos momentos especiales y uno de ellos -mismo que comentaron al unísono- fue la temporada de las posadas. Otro, comenta AnaRosa, ?fue cuando nos fuimos a tomar fotos?. No cabe duda que es una amistad muy sólida la que los une.
Por último, encontramos a Carlos Daniel Portal y a Eduardo Ramos, ellos tienen tres años de conocerse y desde entonces se llevan muy bien.
Carlos y Lalo comentan que tienen varios amigos en común, pero los que sin duda son los más cercanos: Ale Cervantes, Manuel García, Juan Manuel Dávila, Christian Pérez y Raúl Chávez.
Estas son las experiencias amistosas sólo de algunos jóvenes laguneros, pero hay muchas más. No dejes pasar este día sin expresar lo mucho que aprecias a tus amigos y cuídalos, porque dicen que es muy difícil encontrar una verdadera amistad.
TRES ELEMENTOS
Como si fuera un triángulo, la sustancia de la amistad se dibuja con estas tres líneas:
Igualdad. Cicerón, que escribió un delicadísimo tratado sobre el tema, decía que la amistad encuentra iguales a dos personas, o las hace iguales. Y Salustio añadía que la amistad es querer y no querer la misma cosa.
Dos personas con almas de aficiones opuestas, de aptitudes refractarias, jamás llegarán a ser amigos. Entre los amigos reina una verdadera hermandad espiritual, porque guardan los mismos ideales, sentimientos semejantes, idénticos intereses. En esto radica el secreto de la vinculación que establece la amistad, cuando dos almas sintonizan entre sí. Si no hay más que divergencias, la amistad será imposible.
Intercambio. La amistad consiste en compartir con otro lo que uno es, lo que uno sabe, lo que uno tiene. Se da para recibir, se recibe para dar. Trueque de servicios, reciprocidad de dones.
En un precioso y continuado flujo y reflujo, el amigo hace feliz a su amigo, lo enriquece, lo ayuda a vivir, le participa sus secretos y sus ideales, le comunica sus problemas y alegrías. Le da lo que puede y, si es preciso, se da a sí mismo.
Complementariedad. Para que de verdad surja la amistad, no basta con que uno dé. Es preciso añadir el deseo de ser ayudado por otro, completado por otro. Lo que a uno le falta de luz, de fuerza, de experiencia, de seguridad, de alegría, de calma, todo eso viene a complementarlo y satisfacerlo el amigo. El amigo colma nuestras indigencias, enriquece nuestras pobrezas, llena nuestros vacíos. La amistad es la plenitud de la personalidad. Porque gracias al influjo del amigo, obtenemos todo aquello de que carecíamos. Se integra la existencia. Se redondea el espíritu. La amistad es como la firma que viene al calce de una carta, le da su valor y la consuma.
FUENTE: Instituto Tecnológico de Psicología
