Con un porcentaje que va a la baja y que la próxima temporada podría poner a Santos Laguna en problemas de descenso, es oportuno empezar a hablar de todos los elementos y factores que podrían ayudar al equipo de la Comarca a recuperar un terreno perdido.
Primero, refiriéndonos al equipo, hay que reconocer que no fue integrado como se planeó porque de todos los refuerzos mencionados inicialmente, ninguno se llegó a concretar, y conste que había muy buenos candidatos como Patricio Galaz y Gonzalo Vargas, entre otros.
Entonces se agarró lo que se pudo y vamos a esperar que sean mejores que todo lo que tenemos. El cuerpo técnico está optimista. Hoy son más los que lo integran y ojalá haya buenas ideas para que los recursos humanos con que se cuenta se aprovechen plenamente.
La directiva ha tenido sólo una modificada, pues sigue la misma con la incorporación de un ex jugador y también es importante tomar en cuenta el apoyo que puedan brindar los medios, que deben ser más tomados en cuenta y más atendidos.
Y punto muy importante es la afición. A ella hay que volverla a invitar a que se vuelva a poner la camiseta número doce, a darle más facilidades y atenderla mejor. Ella tiene dos campañas algo alejada y aunque no del todo, sí se extraña su presencia en los partidos.
Ojalá que Santos no se encierre en una torre de marfil y se abra a todos los factores que pueden apoyarlo. Ojalá haya menos puertas cerradas. Recordamos que el primer refuerzo fue presentado a los medios y los restantes sólo a los jugadores y a puertas cerradas. Ojalá todo mejore.
