Desde la llegada de Joseph Blatter a la presidencia de la FIFA, se han lanzado algunas sugerencias, patrocinadas por el mismo directivo, para ir buscando la mejor forma de regularizar y sancionar todo lo que es el entorno de un deporte cada vez más popular que atrae a millones de seguidores en todo el mundo.
La última de estas sugerencias es la de aconsejar a los entrenadores no fumen mientras estén en el banquillo dirigiendo a sus equipos, por el mal espectáculo que ofrecen, ante un público televidente donde abundan los niños que siempre están buscando ejemplos a seguir.
Últimamente mucho se ha comentado de la adicción que tienen tanto Ricardo Antonio La Volpe como Rubén Omar Romano por fumar. Sus nervios quieren calmarlos aspirando humo, consumiendo cigarrillos que es un contento, algo en lo que tienen un primerísimo lugar.
También se ha hablado mucho de sancionar con más severidad la actitud ofensiva de los jugadores, que al ser amonestados recurren no sólo a los insultos contra el silbante sino a los mismos empujones o enfrentamientos de reto con el silbante, en el mismo momento de la sanción o después del partido.
Joseph Blatter, que se ha convertido en un adalid del famoso ?Fair Play?, quiere que el futbol evolucione para mejorar y para que sea un espectáculo que no sólo apasione a los niños, jóvenes o adultos, sino que esté regido cada vez por reglas más claras y precisas, y que no haya dudas sobre lo que se sanciona.
Incluso se ha dejado volando en el ambiente la sugerencia de respaldarse con los avances de la tecnología para establecer si algunas faltas fueron realmente graves, si cayeron o no los goles, etc. Así que este mismo año podrían aparecer innovaciones en cuanto a la forma de sancionar el futbol.