Ney Blanco de Oliveira, toda una época dentro del futbol de la Comarca Lagunera. Lo recordamos como jugador, convertido en un gran mariscal de campo, y luego ya como técnico, al frente del Laguna, aquella Ola Verde que tantos recuerdos dejó.
Y en esta columna narrábamos de sus cosas tan particulares, como cuando en las sesiones de la directiva dejaba a todos asombrados con sus proyectos, que por más afanes no se concretaban y el equipo no enderezaba, a pesar de los propósitos de todos.
Aquí nació una hija suya, y de ella nos platicaba cuando hablábamos por teléfono. De esto no hace mucho tiempo, y recordaba anécdotas y cosas que había vivido entre nosotros, con su memoria prodigiosa que guardaba figuras y nombres.
Siempre le tuvimos agradecimiento por todo lo que nos apoyó cuando cubríamos lo mismo campeonatos que torneos importantes en Guadalajara, como aquella Copa Mundial de 1970, donde nos facilitó identificación de primera para estar cerca del seleccionado brasileño.
Tenía muchos deseos de venir un largo tiempo a la Comarca, para platicar, visitar amigos y traer a su hija que tanto cariño tiene por estas tierras donde nació. Valdemar García nos habló de su fallecimiento y de los problemas de salud que tuvo últimamente
Y conste que era un roble, de constitución fuerte, pero un problema que no parecía tan serio terminó con su vida. Descanse en paz, y a su familia le enviamos nuestro pésame, con el agradecimiento de siempre, porque supo comportarse a la altura de los grandes.