¡Qué fiesta la del miércoles por la noche en el Estadio Corona! Nadie imaginaba el éxito que se tendría en todos los aspectos. La despedida de Pedro Muñoz como futbolista fue el motivo para que la afición abarrotara el lugar y colaborara con una noble causa.
Los señores del Club Rotario Campestre estaban llenos de felicidad, pues en el viejo estadio del oriente quedaba de manifiesto el espíritu de afecto y solidaridad, el primero para un jugador que fue toda entrega y lo segundo para apoyar a los niños con capacidad diferente.
Y en la cancha cada quien ponía su parte para que la fiesta fuera inolvidable. Todos los jugadores del Santos, lo mismo ?El Pony? Ruiz que Matías Vuoso o Junior César, incluidos Antonio Olvera, Jorge Campos, Luis Michel y demás, aportaban su entrega.
Y la nota sentimental la pusieron todos los que vinieron, quienes mostraban cosas que los hicieron grandes y famosos, como esas jugadas de Antonio Carlos Santos, como ese accionar de Miguel España, como esa solidez de Luis Romero en la zaga.
Y luego, Pedro Muñoz se lució en la defensa y hasta anotó goles que mucho practicó en Santa Rita en días pasados, pues ahí lo veíamos cada día entrenando con los Guerreros como si estuviera en plena campaña. En fin, una gran fiesta para una inolvidable despedida y una gran causa.
Ayer, Santos regresó al trabajo, y en Santa Rita, Juan Rodríguez, técnico del equipo piloto, dio los últimos toques a la preparación del equipo juvenil de fuerzas básicas, que hoy irá a Miguel Auza, Zacatecas, al tradicional Cuadrangular de Semana Santa.
