Esta eliminatoria rumbo al Mundial tiene de todo, alegría para los ganadores y tristeza y desilusión para los perdedores. México celebra todavía lo que hizo ante Estados Unidos, aunque todos reconocen que faltó más aplicación para redondear la victoria.
También hay gran felicidad en tierras ecuatorianas, porque la selección de su país dio el campanazo al golear 5-2 a la albirroja de Paraguay, después de un inicio arrollador de los guaraníes que celebraban anticipadamente con los goles de Cardozo y Cabañas.
Pero aparecieron los dos goles de Édison Méndez, el mismo que estuvo muy poco en Santos, con los cuales ayudó a cambiar el panorama, y aquello terminó en una de las peores humillaciones para los paraguayos y su técnico Aníbal Ruiz.
Édison venía con mucho ruido a Santos Laguna, sin embargo tuvo pocas oportunidades, y al final su inactividad le molestó, al grado de abandonar al equipo pretextando su falta de acción. Hubo un mutuo acuerdo para que dejara de pertenecer a Santos.
México no tiene un partido fácil mañana ante Panamá. Los del Canal han mostrado progresos notables y cuando los visitan en su estadio saben crecerse, así que Ricardo Antonio La Volpe necesitará de la experiencia y contundencia de sus atacantes.
Santos ha regresado al trabajo y pone atención a su zona defensiva, tomando en cuenta la efectividad de los Pumas, que saben aprovechar las fallas rivales para hacer daño. ?Yayo? De la Torre sabe que también hay que reforzar la media cancha.