Quedan muy pocas fechas del actual campeonato, y para fortuna de Santos Laguna, de los seis partidos que le restan por disputar sólo dos son fuera de casa, ante Toluca en la Bombonera y ante Tigres en el Volcán de la Sultana del Norte.
Y cuatro encuentros los tendrá en el Estadio Corona, primero ante los Tuzos del Pachuca el próximo domingo, luego recibirá a los Tiburones Rojos del Veracruz, y el miércoles 27 a las cuatro de la tarde recibirá a los Pumas en el partido pendiente de la fecha once.
Y el torneo regular lo cerrará también en casa ante los Cementeros de la Cruz Azul. Con 18 puntos conseguidos, Santos tiene todavía posibilidades de meterse en la liguilla, pero deberá jugar mucho más aplicado dentro y fuera para no seguir regalando puntos.
Ninguno de los rivales pendientes es fácil. Todos le han complicado la existencia en juegos anteriores, como el Pachuca, con el que se medirá esta semana, equipo urgido de puntos por su pobre cosecha en esta campaña.
Pachuca ha invertido mucho y ha recibido el apoyo del Gobierno del Estado, por lo que no desea volver a aquellos tiempos de incertidumbre, cuando no tenía la imagen que ahora proyecta con universidad, estadio remozado, hotel de lujo, etc. etc.
Hoy día los Tuzos conforman un buen equipo, con jugadores que han estado en selecciones, y adonde ha llegado como gran refuerzo Jared Borgetti, héroe de mil batallas con Santos Laguna y actual puntero de la Selección Mexicana.
