Santos que por lo general jugaba bien en casa y ganaba todos sus partidos en este torneo, aflojó ayer el paso, perdió el balón y no lo hizo ante un equipo que lo presionara sino todo lo contrario, y al final apenas consiguió un pobre empate a un gol ante Pumas.
Pumas, que no tiene ya aspiraciones en este torneo, se paró con muchas caras nuevas. Hugo Sánchez no mostró mucho interés en ganar el cotejo, incluso muy poco se le vio reclamando, pues por lo general estuvo en la caseta viendo y platicando.
Bien parados los rivales, complicaron el accionar de los de casa en la primera parte, hasta que casi al final una serie de jugadas entre Rodrigo Ruiz, Matías Vuoso y Gerardo Espinoza fue culminada por éste para anotar casi al final de la primera parte.
Y la gente, que llenaba el Corona, se alegró y esperó un segundo tiempo contundente, pero ocurrió todo lo contrario, porque los jugadores del Santos salieron imprecisos, perdiendo el balón y dejando la iniciativa a unos Pumas sin garras que tampoco mostraban grandes cosas.
En las tribunas se notaba el desaliento al ver el accionar de los de verde que nunca tuvieron acciones de peligro ante la meta de Bernal, hasta que en las postrimerías del partido vino el empate por conducto del uruguayo Diego Alonso.
Complicada su situación, Santos deberá ir al Volcán en busca de su segundo triunfo fuera de casa, algo que se antoja difícil, y luego cerrar aquí contra el superlíder Cruz Azul. Se dejó ir la gran oportunidad de calificar y ahora tendrá que sufrir para lograrlo y jugar mucho mejor.