Tigres, que no ha tenido un buen desempeño en este torneo, pues ha ganado sólo cuatro partidos, perdido cinco y empatado seis, para lograr apenas dieciocho puntos, tratará esta tarde de agenciarse tres puntos más a costillas de la irregularidad del Santos, que no sabe ganar fuera.
Leonardo Álvarez ha sido sostenido en el puesto y por ahora no se habla de sacarle la silla. Además se cuenta con un buen plantel, donde los refuerzos han apretado el paso en las últimas fechas, como se ha visto en los partidos contra Dorados y contra Águilas.
Lo mejor de los Tigres esta campaña ocurrió en la fecha nueve cuando golearon seis goles a cero a los Diablos Rojos del Toluca, lo que pronto se olvidó pues fueron al puerto y ahí los Tiburones Rojos los derrotaron dos goles a cero y volvieron a caer por igual marcador ante Tecos.
En estos momentos Tigres está presionado y su afición también toma parte, a grado tal que la misma directiva del Santos estuvo recomendando por medio de avisos y desplegados, que los seguidores santistas laguneros se abstengan de viajar hoy a la Sultana.
Todo con el deseo de evitar actos de violencia como ya han ocurrido. Hoy se busca cuidar la integridad física de quienes gustan del futbol como se viene difundiendo en todas las canchas, pues no queremos en México hechos de barbarie como ocurren en otros países.
Santos debe presentarse en el Volcán con el deseo de hacer un buen papel, pues necesita de los tres puntos en disputa para entrar en la liguilla antes de que se vuelva a meter en el cajón reservado para los equipos del montón, de esos que no aspiran a nada.