Pudieron ser seis y no cinco los goles anotados por Jaguares a Santos Laguna, pero, inexplicablemente, casi al inicio del partido le fue anulado un tanto a Melvin Brown cuando parecía que limpiamente anotaba ante las narices de Mauricio Caranta.
Ya en el primer gol oficial mucho tuvo que ver lo realizado por Gabriel Palmeros, pues el ex santista, con una gran condición física y mejor dominio de balón, se fue por la banda derecha y casi en la línea final mandó centro que pasó cerca de Cabañas y aprovechó Ochoa.
Decíamos anteriormente que Gabriel se había ganado a pulso la titularidad en Jaguares, y que lo mismo podía ser utilizado de defensa, carrilero o volante, porque así fue preparado aquí en tiempos del mismo Luis Fernando Tena.
En el primer tiempo, Santos navegaba sin rumbo y con casi cero agresividad. Solamente un testarazo de Carlos Cariño puso en acción a Omar Ortiz, que estaba como un aficionado más viendo el partido y poniéndose la máscara en cada gol anaranjado.
Ya en la segunda parte hubo más ocasiones en que Santos fue al frente sin fortuna, hasta que surgió ese gol de chilena que anotara Matías Vuoso para meterse en la fila de campeones de goleo que ya formaban Kléber, Walter Gaitán y ?El Loco? Abreu.
Santa Rita entra en un periodo de descanso, lo que será aprovechado para darle su manita de gato a las canchas, ahora que estén de vacaciones los jugadores, las cuales podrían alargarse dos o tres semanas mientras se buscan los tres refuerzos.
