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Un sistema pendiendo de alfileres/Del tintero

Fidencio Treviño Maldonado

Ahora que los cañeros productores de azúcar lloran como mujeres lo que no supieron defender como hombres, se dan cuenta cuán débiles son nuestras estructuras a cualquier nivel, lo mismo pasó con el maíz hace años cuando tuvimos que importar el grano amarillo de los Estados Unidos de Norteamérica y no bastaba en ese entonces el blanqueador o la misma cal para hacer que las torillas se tornaran de color blanco.

El frijol, otro de los alimentos básicos del mexicano desde hace tiempo también lo estamos importando, la carne de pollo, de ganado bovino, de puerco y de carnero pasa por miles de toneladas con y sin permiso de importación y en muchas ocasiones sin un permiso de la Secretaría de Salud.

De la caseína ni qué decir ya que el 85 por ciento del queso (de todos tipos) que se fabrica a nivel nacional es de este producto (la grasa o manteca para complementar la elaboración también es importada y no sólo el queso sino otros subproductos de los llamados lácteos incluyendo algunas leches de no muy fidedigno origen y oscura reputación).

El depender de otros países ha sido la constante y más allá de que Cuauhtémoc Cárdenas y Manuel Bartlett defiendan la soberanía, el rezago en muchos aspectos en México es plausible y ni siquiera podemos decir que estamos orgullos en las cifras de generación de empleos y al paso que vamos serán más los conacionales ocupados en los trabajos con los gringos que los de nuestro país, en este extremo de la cadena de generación de empleos está la consecuencia de una desigualdad de salarios y una desventaja social en el nivel de vida de los mexicanos y es aquí donde a los gobiernos les han faltado algunas decisiones importantes como son: que las empresas sean más libres, la mano de obra más flexible y otra sin duda será la política económica (fiscal y monetaria) más expansionista, es decir abrir el mercado competitivo, en estos aspectos se debe fijar la reforma fiscal, ¿por qué? por el simple hecho de que ha quedado demostrado que el actual sistema es un rotundo fracaso para el pueblo y los únicos “ganones” son los de la clase alta, los políticos y los sempiternos líderes.

Terminar con los embrollos y el terrorismo fiscal sería un logro ya que el papeleo en Hacienda hace casi imposible llevar una recaudación veraz, todo un juego de obstáculos, trampas y el ejemplo es que las transas son la comidilla diaria en esta celosa dependencia.

Una empresa grande “equis”, declara pero no paga todos los impuestos como debe ser, sólo lo hace una o dos veces al año ¿cómo? Pues sencillo con una determinada cantidad de lana a uno de los tantos bufetes de contadores les adosa los papeles con algunos billetes y esta empresa jamás será revisada, en cambio algunos comercios chicos o medianos siempre están en la mira de los celosos guardianes de la SHCP, la misma corrupción es propiciada desde adentro, mientras los legisladores siguen en su inextricable dilema de aceptar, cambiar o de plano no entrarle a la reforma fiscal ya que la actual es obsoleta por el lado que se le vea.

La verdad no se puede esconder y es tan grande como la inoperancia de nuestros gobernantes y nuestro sistema se tambalea, el petróleo sostén de muchos servicios lo estamos matando como a la gallina de los huevos de oro, pronto la energía eléctrica será un problema por tantas bondades populistas que brinda a sus trabajadores y clientela preferencial.

Un sistema caduco sin cambios es el que Fox entregará, con retos y hasta blufeadas como la que le están dando los narcos y otras mafias en el pirataje y contrabando ¿por qué? por lo débil de nuestras estructuras, que ni siquiera es capaz de meter al “bote” a tanta rata confabulada en la función pública, partiendo de ahí con qué cara y respaldo moral y de ética nuestras autoridades pueden predicar con el ejemplo, mientras un joven que se roba un perfume en una tienda de servicio es sentenciado a varios años de cárcel, una ratota de cola larga y corbata de seda puede robarnos a los mexicanos millones de dólares y ni siquiera es molestado.

Con los gobernadores, los presidentes de partidos y recuas que le acompañan en plena campaña y nuestros funcionarios públicos metidos en la ingobernabilidad, algunas autoridades judiciales en el narco, nuestra economía en franca desaceleración (aunque aclarando que nunca ha estado acelerada), la pobreza como plaga apocalíptica avanza inexorable, aunado a la pérdida de gobernar con el sentido común, nuestro sistema político, social y judicial pende para desgracia del noble pueblo de unos débiles alfileres.

Correo electrónico:

inga_1031@hotmail.com

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