Pugnará la Camara de Comercio para que se beneficia a personas que en realidad tengan una necesidad.
Matamoros, Coah.- Ante la falta de acuerdos con las autoridades municipales salientes para tratar de frenar el crecimiento del ambulantaje, la Cámara de Comercio confía en que será tomada en cuenta por la nueva administración para la designación de quienes se desempeñarán como supervisores de Plazas y Mercados.
El presidente del organismo en Matamoros, Fernando Méndez Zapata informó que aunque es un problema que existe en todas las ciudades porque representa un medio de subsistencia, en el caso de este municipio urge una reglamentación del comercio ambulante.
Con este propósito, dijo que ya se tuvo una reunión con el alcalde entrante, Raúl Onofre Contreras, a quien se le hizo ver la importancia de que el comercio organizado sea tomado en cuenta para la designación de las personas que se harán cargo de la supervisión en la ocupación de los espacios públicos en la zona centro.
La idea del organismo es proponer a quienes puedan ocupar dichas plazas en el municipio, lo que podría contribuir en un mayor control.
Esto, debido a que inicialmente los criterios para otorgar permisos para ocupar la vía pública era beneficiar a las personas con alguna necesidad física especial, así como a los adultos mayores o quienes no realizaran ninguna otra labor.
Sin embargo, éstos se distorsionaron y en la actualidad, se ha convertido en una fuente importante de ingresos para familias completas, las que tienen en su poder varios permisos y por esta misma razón, hasta operan una especie de sucursales dentro del mismo centro de Matamoros, según destacó el presidente de Canaco.
De hecho, dijo, diciembre es una temporada propicia para el incremento desproporcionado de la actividad, lo cual se refleja con la presencia de vendedores de productos de diversa índole, desde plantas y adornos navideños hasta pistache, nuez y naranjas en vehículos que se estacionan en el primer cuadro.
Méndez Zapata manifestó que en alguna ocasión surgió el compromiso de que los comerciantes establecidos, no ocuparían las banquetas con su mercancía, siempre y cuando la autoridad restringiera el otorgamiento de permisos.
Debido a que no se respetó ese acuerdo y las calles se cubrieron cada vez más de vendedores ambulantes, los comerciantes optaron por sacar sus productos para con ello incrementar los ingresos de la temporada.
También se hizo la propuesta de no ocupar las calles de la zona centro para dejar opciones de estacionamiento a los consumidores, pero hubo pocos que la respetaron y esto también ha influido en perjuicio del comercio establecido.
Un pendiente más
La actualización del Reglamento de Plazas y Mercados constituye otro de los pendientes que la administración de Felipe Medina Cervantes dejará a las nuevas autoridades.
De acuerdo con lo manifestado por el primer regidor, Héctor Andrés Luna Ibarra, la poca atención que se prestó a este aspecto de la administración pública ha contribuido a que existan serios problemas en cuanto a la ocupación de espacios en la vía pública para la práctica de la actividad comercial, de la cual dependen cientos de familias.
Indicó que era importante contar con un reglamento actualizado, en virtud de la necesidad de poner orden ante el crecimiento desmedido de la actividad informal.
Incluso, podría haber contribuido en la generación de ingresos económicos la regulación de los comercios que operan en los llamados “mercaditos”, donde decenas de comerciantes prácticamente se han apropiado de los locales que son propiedad del municipio, y por los que no realizan ningún pago al municipio.