REGALO DE DIOS
Para José Roberto García Maciel, mi nieto.
José Roberto herencia de mi hijo,
pedacito de cielo, mejillas de arrebol;
con tu cara risueña el Señor me bendijo,
y soy feliz al verte corriendo bajo el sol.
No puedes comprender a tu edad tan temprana,
el gozo tan enorme, que es mirarte crecer,
si estás cerca de mí hay luz en la mañana,
y dentro de mí siento un nuevo amanecer.
Pido a Dios que te cuide y lleve de la mano,
hasta que seas un hombre, un hombre de verdad;
generoso y amante, con espíritu sano,
caritativo, tierno y lleno de bondad.
Pedacito de cielo,
pedacito de sol,
eres lo más hermoso,
que Dios me regaló.