EL UNIVERSAL-AEE
GINEBRA, SUIZA.- La Organización Mundial de la Salud (OMS) calculó ayer que la elaboración de vacunas y el incremento de la producción de medicinas antivirales para combatir una eventual pandemia de gripe aviar costará alrededor de 500 millones de dólares en los próximos tres o cuatro años.
Ese costo se añadirá a los mil millones de dólares aproximados que el Banco Mundial afirma que serán necesarios para controlar el brote actual de la dolencia aviar, y prepararse para una posible epidemia humana, dijo la doctora Margaret Chan, principal funcionaria de la OMS a cargo de la vigilancia de la enfermedad.
El cálculo se emitió al final de una conferencia de tres días y más de cien países participantes, destinada a determinar las medidas que deben tomarse en vista de la amenaza de la gripe aviar.
“Tenemos nuestros planes sobre el papel, pero ahora debemos probarlos en la práctica”, dijo el doctor Lee Jong-wook, director general de la OMS. “Una vez que aparezca el virus de la epidemia será demasiado tarde”.
La reunión concluyó que la gripe aviar debe ser controlada por medio de las vacunas y el sacrificio selectivo de aves en los países afectados, y que se deben mejorar los sistemas de supervisión a fin de detectar rápidamente y contener cualquier brote animal o humano.
INTENSIFICAN ESFUERZOS
Por su parte, el Gobierno chino exigió ayer a todo el país intensificar los esfuerzos en la lucha contra la gripe aviar, al reconocer que la enfermedad no ha sido controlada por completo y aumenta el riesgo de posibles infecciones en humanos, informó Xinhua.
A su vez Vietnam, el país más afectado por la influenza aviar, recibió ayer la autorización de la farmacéutica suiza Roche para producir el antiviral Tamiflu a partir de 2006, por lo que es la primera nación en obtener la licencia.
En tanto, las autoridades japonesas ayer ordenaron sacrificar a 170 mil aves y pollos de una granja de la prefectura de Ibaraki, tras el hallazgo de signos de la gripe aviar, que ha causado la muerte de 63 personas en el sureste de Asia desde finales del año de 2003.
El primer ministro chino Wen Jiabao recordó que el país es el mayor criador de aves de corral del mundo, por lo que los gobiernos locales deben conocer de la gran amenaza que supone esta epidemia.