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Vaqueros Laguna viven su peor año en la Liga Mexicana de Beisbol

Claudio Martínez Silva

Torreón, Coah.- Con la doble derrota en el Foro Sol ante los Diablos Rojos del México, terminó una auténtica pesadilla para los seguidores de Vaqueros Laguna, seguramente también para los peloteros, el cuerpo técnico y la directiva. Queda en el recuerdo de 2005, el peor año en la historia desde el lejano 1985, cuando llegó a Torreón la franquicia de los Indios de Ciudad Juárez.

Hasta antes de la pésima campaña que ya terminó para Vaqueros Laguna, se recordaba como la peor la de 1997, cuando los Algodoneros de Unión Laguna finalizaron en el último lugar global de la Zona Norte, con .407 de promedio en ganados y perdidos, luego de que en 119 juegos ganaron 48, perdieron 70 y empataron uno, para ubicarse a 19 de los líderes Sultanes de Monterrey.

Se antojaba muy difícil repetir una actuación tan mala en resultados como la de 1997, pero lamentablemente se atravesó 2005, la tercera temporada en la vida de Vaqueros Laguna, con números tan negativos que el naranja fue el penúltimo lugar de la tabla general, con 38-71 en ganados y perdidos, 25.5 juegos abajo de los líderes globales de la Zona Norte, los Potros de Tijuana. Y al hablar del equipo tijuanense no debe pensarse que José Juan Bellazetín sea un mago o algo parecido, sencillamente ?El Piri? supo poner en su lugar a cada uno de los peloteros estrellas que la directiva, a través de Raúl Cano, pudo traer a la organización.

Tijuana es líder general de la Zona Norte como resultado de la visión de Raúl Cano, que cuenta con todo el apoyo de los propietarios de la franquicia y los excelentes resultados en lo deportivo, ahí están a la vista. Randall Simon se fue cuando era uno de los mejores bateadores de la liga, mientras que al venezolano Luis Landaeta le dieron las gracias y la novena nunca perdió el ritmo. Clave en la marcha de los Potros resultó Carlos Valencia, un segunda base mexicano que conectó 32 cuadrangulares y fue apoyado por peloteros mexicanos de la talla de Julio César Hernández, José Manuel Espinoza, Armando Rodríguez, Emmanuel Valdez y Alejandro Villarreal.

En el pitcheo, los Potros contaron con la figura de Alonso Beltrán, Hugo Castellanos, Roberto y Salvador Garibay, Jorge Luis Meza, Joel Navarro, Eduardo Neri, Julio César Parra y Aarón Quiroz. Una muy buena base mexicana que en el papel a nadie espanta pero que la directiva tuvo el acierto de reforzarla con extranjeros muy rentables, como el eterno Derrick White, George Arias, Luis Figueroa, Eddie Pearson, de gran aporte al final de la temporada, Nate Bland y el cerrador Andy Shibilo.

Dicen que las comparaciones son odiosas, pero en ocasiones son necesarias; si antes de iniciar la temporada 2005 se analiza la base mexicana de Potros de Tijuana y Vaqueros Laguna, no existe una gran diferencia. Si los fronterizos tienen peloteros importantes como Carlos Valencia, Julio César Hernández o Alonso Beltrán, Vaqueros Laguna cuenta con Abel Martínez, que de nueva cuenta tuvo una actuación sobresaliente, Cornelio García, que jugó como un verdadero novato y terminó con grandes números, y José Amador Rodríguez, entre los mejores de dobles, con 35.

Qué decir de Francisco Omar de la Torre, joven que fue ignorado por los managers y si tuvo cierta regularidad en su accionar fue debido a que no había otro para cubrir el jardín central; el de Guadalajara finalmente participó en 76 juegos, conectó 64 imparables, 14 fueron dobles, dos triples y seis jonrones, mientras que con el guante se constituyó en una excelente opción defensiva, situación que no sólo se comentó a nivel local, sino en las visitas de Vaqueros a Tijuana, Saltillo y Monterrey, entre otras plazas.

Ni hablar de Julio Reyes, ese elegante zurdo que en el arranque de la temporada estaba destinado a la banca, pero que las necesidades del equipo obligaron a utilizar regularmente, ya sea como primera base, designado o en el jardín izquierdo. Reyes tuvo una lesión muscular que le fue mal atendida, lo que provocó que su inactividad fuera más prolongada. Al final de la temporada el de San Luis Río Colorado, Sonora muestra números de .313 en 83 partidos, 84 imparables, 12 dobles, un triple y diez cuadrangulares. Idelfonso Lara, Heriberto Salas, Rafael Castañeda, Raúl López, Ricardo Ruiz, Héctor Estrada y Carlos Pacho completan una base mexicana con mucho más que dar, de haber tenido el apoyo de auténticos refuerzos extranjeros.

MELVIN NIEVES, LO RESCATABLE

Cuando el equipo aún estaba con buenas posibilidades de alcanzar el play off, la directiva hizo una gran contratación, Melvin Nieves, que a la postre se convertiría en el mejor extranjero del equipo, a pesar de haber participado en apenas 36 partidos. El de Puerto Rico logró acumular .339 de promedio ofensivo, anotó 43 carreras, conectó 42 imparables, ocho fueron dobles y 12 cuadrangulares, todo para 35 carreras producidas. Queda en el aire una pregunta ¿qué números hubiera entregado Melvin Nieves de haber sido contratado en lugar de Rudy Pemberton?.

Pero cuando sólo uno de los 12 extranjeros que se tuvieron a lo largo de la temporada funcionó, es fácil entender las razones que convirtieron a Vaqueros Laguna en uno de los peores equipos de la liga en 2005, sólo arriba de los Langosteros de Cancún. Melvin Nieves fue un extraordinario refuerzo y sus números no fueron mejores, eso se debe a Wes Clements, que tuvo la gracia de provocar la lesión del boricua en aquella lamentable acción en tercera base, cuando primero dio luz verde a Cornelio García y después le marcó el alto.

Adrián ?Duquecito? Hernández llegó a La Laguna entre bombos y platillos, pero entre sus viajes a la Florida, sus enfermedades y sus lesiones, estuvo muy lejos de ser lo que se esperaba de un lanzador de grandes ligas que busca una oportunidad para regresar a ese beisbol. El moreno de La Habana es sin duda un excelente lanzador, pero su carácter lo perdió varias veces en la loma, cuando reclamaba al ampayer principal los conteos que no eran de su agrado. Adrián Hernández se va con 3-6 en ganados y perdidos en 94.1 entradas de trabajo, recibió 113 imparables, regaló 43 bases por bolas para un excelente balance, aunque aceptó 56 carreras limpias y 12 cuadrangulares. En favor del ?Duquecito? se puede decir que cuando tocaba su turno de lanzar, su ofensiva producía muy pocas carreras.

Leoncio Estrella vino al equipo para ocupar el sitio que originalmente era de Doug Linton; el derecho de República Dominicana había jugado en 1993 con los Cerveceros de Milwaukee, en 2004 estuvo lastimado y llegó a Liga Mexicana en busca de hacer números para regresar a Estados Unidos. La actividad de Estrella con Vaqueros fue muy escasa, porque pronto pasó a El Águila de Veracruz, en donde se mantuvo hasta el final de la temporada, con muy buen trabajo en labores de relevista.

El tercer lanzador importado fue Ben Rivera, el dominicano de gran actuación en 2004 con este mismo equipo; Bienvenido mantuvo un gran nivel y marchaba entre los mejores de efectividad en la liga, hasta que se metió en mala racha junto con todo el equipo. El exceso de trabajo, producto del mal manejo de los managers en turno, provocaron una lesión en el espigado lanzador, que a un mes del final fue enviado a los Rieleros de Aguascalientes.

Al irse Leo Estrella, la directiva de inmediato trajo a Oswaldo Mairena, elegante zurdo nicaragüense que había tenido grandes actuaciones con los Diablos Rojos del México. Oswaldo vino de menos a más, pero la falta de consistencia fue su principal enemigo. Los juegos pasaban y Mairena lanzaba en buena forma, pero de pronto venía la caída estrepitosa y la derrota. El zurdo fue habilitado como relevista, con resultados negativos, para regresar a la rotación de abridores en la parte final de la temporada y convertirse en el lanzador de más derrotas de toda la liga, con récord de 3-11 en ganados y perdidos, para 7.12 de efectividad.

Ante la lesión de Rafael Álvarez, Vaqueros Laguna trajo de los Olmecas de Tabasco al también venezolano Elio Serrano; desde su llegada hasta la primera vuelta, Serrano rindió excelentes dividendos y aquí se habló de sus méritos para estar en el Juego de Estrellas. Para la segunda vuelta su efectividad decayó, y cuando había llamado la atención de los Mets de Nueva York tuvo una actuación lamentable en el Estadio de la Revolución, justo al ser observado por un buscador de los Metropolitanos.

José Vargas fue llamado cuando el pitcheo de Vaqueros naufragaba día con día; ya iniciada la temporada, el dominicano llegó a la organización como el mejor relevista de la liga invernal de su país. Vargas no fue ni la sombra de lo que indicaban sus números y pronto se marchó a los Leones de Yucatán, quienes a cambio enviaron temporalmente a Oswaldo Verdugo.

Fue así como el buen intento que hizo la directiva no se veía reflejado en resultados positivos; elementos como Rafael Álvarez y Ramón Espinosa fueron cien por ciento rentables, pero lamentablemente las lesiones los dejaron fuera de la organización, mientras que Rudy Pemberton, a pesar de las oportunidades que recibió de la directiva, nunca fue ese elemento que se esperaba; el dominicano pasó sin pena ni gloria por los Langosteros de Cancún, de donde fue enviado a la Liga Norte de Sonora.

Greg Martínez parecía una solución para abrir el orden al bat y cubrir el jardín central, pero cuando el equipo estaba en Tijuana, el estadounidense decidió retirarse del beisbol para incorporarse al Cuerpo de Bomberos de Las Vegas, Nevada. La mala fortuna estaba del lado de Vaqueros, porque a la salida de este pelotero se unían lesiones y enfermedades como hace muchos años no se recuerda en el beisbol profesional de La Laguna.

Parece mentira que dos equipos con una buena base de peloteros mexicanos hayan tenido actuaciones tan diferentes; los Potros de Tijuana como líderes globales de la Zona Norte, mientras que Vaqueros Laguna en la última posición de ese sector. La diferencia fue marcada por los refuerzos extranjeros de uno y otro equipo.

Clave de la mala actuación fue también el trabajo de los managers y coaches; en la misma temporada se tuvo a cuatro timoneles, además de un despido masivo de coaches, asesores y el preparador físico. El tema del cuerpo técnico da para analizarlo en otra ocasión; por ahora seguimos con la idea de que la base mexicana de Vaqueros Laguna es muy buena, pero cuando los extranjeros no entregan lo que de ellos se espera, el éxito sólo está al alcance cuando esa base es como la que hoy tienen los Diablos Rojos del México y los Tigres de la Angelópolis.

Vaqueros Laguna utilizó a 12 refuerzos extranjeros en 2005

Nombre posición Originario

Adrián Hernández lanzador Cuba

Leoncio Estrella lanzador R. Dominicana

Bienvenido Rivera lanzador R. Dominicana

Oswaldo Mairena lanzador Nicaragua

Elio Serrano lanzador Venezuela

José Vargas lanzador R. Dominicana

Ramón Espinosa outfield R. Dominicana

Rafael Álvarez outfield Venezuela

Rudy Pemberton outfield R. Dominicana

Greg Martínez outfield Estados Unidos

Lou Lucca infield Estados Unidos

Melvin Nieves outfield Puerto Rico

Fuente: Investigación de El Siglo de Torreón

Posiciones globales de la Zona Norte

Equipo JG JP PTJE. JV

Tijuana 64 46 .58182 ---

Saltillo 63 47 .57273 1.0

Monterrey 56 50 .52830 6.0

México 56 51 .52336 6.5

Aguasc. 55 53 .50926 8.0

Monclova 53 55 .49074 10.0

San Luis 45 63 .41667 18.0 (*)

Laguna 38 71 .34862 25.5 (*)

(*) Eliminados

Fuente: Liga Mexicana de Beisbol

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