México, DF.- Gritos de ?paisano?, ?Guille, Guille? y ?papacito? escuchó Guillermo Franco en el aeropuerto capitalino rumbo al avión que llevó a la selección mexicana de futbol a Trinidad y Tobago.
Luego del entrenamiento en el Centro de Alto Rendimiento (CAR), los jugadores y cuerpo técnico comieron, luego se subieron al autobús que los trasladó al aeropuerto, donde abordaron un avión que los llevó a su destino, Puerto España.
Después de descender del autobús, el ?Guille? Franco caminó por las instalaciones donde fue reconocido por los paseantes y trabajadores de los diversos locales comerciales.
?Paisano, paisano? le gritó un comerciante cuando pasó por una de las zonas de restaurantes, otros simplemente le corearon ?Guille, Guille? y una dama expresó ?ahí va, ahí va... el papacito?.
Franco jugó el sábado pasado su primer partido con el tricolor, después de que el futbolista de origen argentino se naturalizó mexicano, en el que anotó su primer gol y dio pases para dos de los cuatro tantos que hizo Francisco Fonseca en el triunfo ante Guatemala por 5-2.
Junto con el delantero viajaron otros 18 jugadores, así como el cuerpo técnico encabezado por el argentino Ricardo La Volpe, quien en el CAR y en el aeropuerto capitalino no hizo declaraciones.
En Puerto España cierra México el hexagonal de la Concacaf que ya calificó al tricolor y las selecciones de Estados Unidos y Costa Rica, mientras que Trinidad y Tobago y Guatemala luchan por el medio boleto que se completará con una repesca ante un representante de Asia.
Ricardo Osorio, Luis Ernesto Pérez, Gonzalo Pineda, Francisco Javier Rodríguez, Rafael Márquez Álvarez, ?Kikín? Fonseca y Gerardo Torrado deberán tener cuidado ante los trinitarios de acumular la segunda tarjeta amarilla que significa suspensión para el primer encuentro de Alemania 2006.