Los productos derivados del vino son ricos en vitaminas A, C y E, lo que contribuye a lograr elasticidad, juventud y firmeza..
Buenos Aires, (EFE).- Además de acompañar exclusivos platos, el vino ha entrado en el campo de la belleza con el desarrollo de la vinoterapia, un tratamiento que en Argentina crece a grandes pasos de la mano de productos que ostentan "un poderoso efecto rejuvenecedor".
Centros de belleza, compañías dedicadas al cuidado del cuerpo y hasta "wine spa" (hidromasaje de vino) han desarrollado líneas con productos basados en "malbec", "cabernet" y "champagne", seducidos por las propiedades de la vid.
"El poder antioxidante de los polifenoles que contiene la uva es cien veces más poderoso que el de la vitamina E, muy utilizada para productos de belleza. Esto hace que los tratamientos basados en el vino retarden el envejecimiento de las células del cuerpo", explicó Fernanda Saravia, gerente del "spa" del Hotel Hyatt de la provincia argentina de Mendoza.
'Spa del vino'
Este distrito del país, situado a mil 050 kilómetros al oeste de Buenos Aires, es conocido como la "tierra del buen sol y del buen vino" ya que concentra el 70 por ciento de la producción de vinos de Argentina, el quinto productor mundial de esta bebida.
La experiencia también se repite en otras provincias del país sudamericano, ya que en la ciudad norteña de Cafayate, en Salta, se inauguró a finales de agosto un "wine spa", un centro enteramente dedicado a tratamientos basados en productos derivados del vino, que linda con una bodega y un lujoso hotel.
"Los huéspedes se van muy contentos del centro porque tienen la posibilidad de estar en un hidromasaje donde realizan los tratamientos, mirando los viñedos y la forma en que se cosecha a través de grandes ventanales", resaltó Florencia Perkins, gerente del hotel "Patios de Cafayate", que conecta al "spa de vino".
En busca de la juventud
En este centro se ofrecen baños en toneles con extractos de uvas, y tratamientos corporales con semillas, derivados del vino, miel y sales marinas, entre otros.
También existen centros de belleza que combinan la vinoterapia con masajes y drenaje linfático para reducir la grasa del cuerpo tanto en las mujeres como en los hombres.
En este novedoso mercado existen, además, fragancias basadas en champaña para la mujer, y en "cabernet" y "malbec" para el hombre, combinados con aceites de cedro, sándalo, pimienta negra, miel, esencias florales y extractos de roble y lapacho.
Algunos especialistas en cosmética natural sostienen que los productos derivados del vino son ricos en vitaminas A, C y E, lo que contribuye a lograr elasticidad, juventud y firmeza.
Los protagonistas estrellas de las pepitas de uva, los polifenoles y bioflavonoides, son antioxidantes naturales, que previenen el envejecimiento cutáneo y protegen la piel de la agresión del medio ambiente y del humo, según coinciden las compañías y centros que utilizan estos productos.
Más beneficios
El rejuvenecimiento no es el único efecto adjudicado a la vinoterapia, ya que este tratamiento también puede "humedecer la piel, reducir el abdomen, afirmar los glúteos y tonificar los músculos", de acuerdo con un informe de Universo Garden Angels, una de las compañías argentinas dedicadas a este segmento.
En este sentido, la firma también asegura que las cremas y emulsiones destinadas a la vinoterapia "hidratan la piel en profundidad, aportan luminosidad, protegen las fibras de sostén de la piel, desintoxican los tejidos y mejoran la circulación".
Los efectos provocados por estos productos han causado interés no sólo en Argentina, donde su consumo va en ascenso, sino también en Brasil, Ecuador y Chile, hacia donde actualmente se exportan.