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CISJORDANIA.- La muerte de tres adolescentes palestinos ayer en el sur de la Franja de Gaza constituye una violación clara del alto al fuego declarado entre Israel y la Autoridad Nacional Palestina (ANP), afirmó el presidente palestino, Mahmoud Abbas.
“Se trata de una clara violación del alto al fuego que se ha llevado a cabo premeditadamente”, señaló Abbas en un comunicado emitido ayer en la ciudad cisjordana de Ramallah.
Israel y la ANP acordaron un alto al fuego el pasado ocho de febrero en la cumbre de Sharm el Sheij (Egipto) y después, el 17 de marzo en El Cairo, Abbas arrancó de las facciones palestinas un compromiso a mantener la calma hasta finales de año.
“La ANP nunca aceptará el derramamiento de la sangre de su pueblo y de sus hijos con esa negligencia. No podemos aceptar que abran fuego contra nuestros hijos con esa facilidad, cuando además no suponen ningún tipo de amenaza”, afirmó.
Y agregó que los niños palestinos “son tan queridos por sus padres como los niños israelíes son queridos por los suyos”.
“Si el Gobierno israelí está realmente interesado en mantener la calma y el alto el fuego debe demostrarlo sobre el terreno. Pero matar así a nuestra gente, sin razón alguna y con esa facilidad, es algo que condenamos”, concluyó.
Según un portavoz de la ANP, “el presidente ha reaccionado con profundo pesar a la noticia de la muerte de los tres adolescentes por soldados israelíes en la ciudad de Rafah”.
Entretanto, activistas de las Brigadas de Azedín al Kasam, brazo armado de Hamas, lanzaron decenas de cohetes contra asentamientos judíos y bases militares en la Franja de Gaza.
En un comunicado asumieron la autoría del lanzamiento de 23 cohetes y granadas de fabricación casera en respuesta a la muerte de los tres niños de 14, 15 y 16 años.
Fuentes locales afirmaron que soldados israelíes abrieron fuego de forma repentina contra un grupo de adolescentes que jugaba al fútbol en una zona cerca de la frontera con Egipto, en el extremo sur de la Franja de Gaza.
Fuentes del Ejército israelí informaron que se trata de una zona donde los palestinos tienen prohibido el acceso, ubicada entre 200 y 300 metros de la frontera con Egipto, y en la que se registran ataques contra las tropas israelíes todos los días, ya sea con explosivos colocados en el suelo o con disparos.
Al parecer, cinco palestinos intentaban arrastrarse hacia la frontera y cuando tres de ellos empezaron a correr hacia un puesto militar israelí fueron abatidos, después de haber efectuado al aire disparos de advertencia.