EFE
JARTUM, DAFUR.- El secretario general de la ONU, Kofi Annan, visitó ayer por segunda vez en once meses Dafur, donde fue recibido por miles de desplazados por el conflicto armado en esta convulsionada región del oeste de Sudán.
Annan, que llegó el viernes a Jartum en una visita de tres días procedente de Adis Abeba, se desplazó ayer al campo de refugiados de Kalma, cerca de Nyala, capital del sur de Dafur (a 800 kilómetros al oeste de Jartum), que con sus 150 mil habitantes es considerado el más grande en África, según fuentes oficiales sudaneses.
Allí se reunió con autoridades locales y con un grupo de hombres y mujeres, quienes le informaron de sus problemas y la situación de seguridad en la región, donde se sufre una de las peores crisis humanitarias actuales.
Varios de los desplazadas llevaban pancartas en las que se podían leer frases como ?Queremos libertad y justicia? en Dafur, donde la guerra civil ha causado ya unos 400 mil muertos y 1.6 millones de desplazados, según datos de la Alta Comisaría de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
Kalma fue escenario recientemente de enfrentamientos entre grupos de los desplazados y agentes de la Policía local, en los que fueron destruidos un centro policial y varias oficinas de organizaciones humanitarias árabes e islámicas.
Los residentes en Kalma acusan a las fuerzas de Policía locales de estar relacionadas con las milicias árabes pro gubernamentales ?Yanyauid?, a las que se atribuyen numerosas atrocidades en Dafur.
Desde que llegó a Sudán, donde permanecerá tres días, el secretario general de Naciones Unidas manifestó que pretende conocer de cerca la situación humanitaria y comprobar la eficacia de los esfuerzos para restablecer la seguridad en Dafur.
Annan también confirmó que las negociaciones de paz entre el régimen de Jartum y los grupos rebeldes se reanudarán el próximo diez de junio en Nigeria, bajo el patrocinio de la Unión Africana (UA), tras seis meses de suspensión.
