A pesar de los ocho grados centígrados con los que amaneció el día de ayer y la desvelada de los festejos de la Nochebuena, familiares y amigos de los internos del Centro de Readaptación Social (Cereso) de Torreón, se dieron cita en el inmueble para convivir con ellos y no dejar pasar este día de convivencia. Como el caso de Víctor Hernández Guevara, quien acudió en compañía de su esposa y sus tres hijos, para convivir con su cuñado Rubén Mercado, quien aún enfrenta un proceso de homicidio simple doloso y aún está en espera de que concluyan las diligencias correspondientes.