Las familias esperan la terminación de la huelga de mineros para recibir sus salarios
CUENCAMÉ, DGO.- Viven en la pobreza a pesar de ser dueños de yacimientos de oro y plata. Miriam Janeth Ibarra Reyes, de nueve años, manifiesta a su corta edad los deseos de ser doctora para resolver las necesidades de su pueblo, Vista Hermosa.
Así como Miriam, los niños y niñas de este pueblo ubicado en el semidesierto, a 20 kilómetros de ciudad Cuencamé, tienen aspiraciones de llegar a adultos para solucionar la problemática que les rodea y hoy luchan por sobrevivir en situaciones por demás críticas.
Por las calles polvorientas del sediento semidesierto Miriam camina de su escuela Justo Sierra a su humilde vivienda cavilando sobre la cruda realidad del presente y la esperanza de recibir sus alimentos ese día. Su madre la espera lavando los trastes preocupada por la falta de dinero; es resultado de la huelga de los mineros que el 19 de abril cumplirá seis meses.
Son las 14.30 horas y el sol cae a plomo y desde la humilde vivienda de Miriam se observa la planta beneficiadora de la empresa Hecla, al pie de las montañas; tal vez sea la mejor ?vista hermosa?, pues el pueblo, aunque pintoresco, muestra la cruda realidad del olvido.
Los pueblos como Vista Hermosa reflejan el semblante de la pobreza, donde existen muchas caras que hablan de su desesperación para lograr el sustento y, en el mejor de los casos, encuentran sólo en la migración la única alternativa de subsistencia.
Los errores del sistema económico, la desarticulación productiva que vive el sector primario y las manipulaciones políticas de años se olvidan y el pasado se reduce a esos rostros de hambre que siempre han estado presentes en el paisaje rural mexicano.
Miriam cursa el tercer año de primaria y desde siempre ha participado de la pobreza de su familia y pueblo en general y como los demás niños no conoce la diferencia más que a través de los medios de comunicación.
Ésa es la realidad de miles de niños del medio rural, que conocen el dolor de su gente y en el dolor se disponen a crecer como hombres de bien; así lo dejan ver a El Siglo de Durango: ?cuando sea grande voy a ser doctora para curar a las familias de Vista Hermosa?, dice Miriam., consciente de la falta de médico en el lugar.
Para ese entonces llega Germán G. Ibarra, de cuarto año, quien aspira a ser arquitecto para construir casas en su pueblo, una plaza con bancas y agrega: ?también deseo que se acabe la huelga para que mi papá reciba su salario y pasarla mejor?.
La señora Belem Débora Machado, madre de nueve hijos, permite el acceso a su casa al reportero y mientras hace el quehacer en la cocina comenta que su esposo Faustino Ibarra Contreras quedó inválido tras sufrir una embolia; ?hoy atravieso por mal momento, la comida, los niños...?, corta la plática, las lágrimas y la tristeza la invaden.
Su nieto Jesús Ibarra Reyes, de tres años de edad, sentado en la cama, juguetea con sus descalzos pies y muestra su rostro lleno de polvo, acababa de jugar en la calle. Su inocencia se encierra en su silencio y una sonrisa.
Miguel Jonathan Pacheco Contreras, de diez años de edad, desea ser policía, ?para investigar y acabar con los malos?, dijo. Mientras Cristofer Sánchez Contreras cursa el cuarto de primaria y su deseo cuando llegue a adulto es ser trotamundos, pues tiene la idea de que ?estos hombres recorren el mundo en sus motocicletas?, pero también pensando en su pueblo, manifestó su deseo de ayudar a las familias más pobres.
En fin, los niños hoy muestran sus deseos de cambiar el curso de la historia de Vista Hermosa, sacarlo de la pobreza, pues de los sueños y aspiraciones han surgido grandes proezas. Estos pequeños serán los protagonistas del mañana.
Beneficios
Vista Hermosa es un pueblo con 300 habitantes; tienen agua potable y energía eléctrica. Tanto la iglesia como la escuela primaria Justo Sierra recientemente fueron rehabilitadas con el apoyo de la empresa minera Hecla, al tiempo que se encargó de construir el camino troncal de 12 kilómetros.
Actualmente se limpia el tinaco elevado de agua potable por empleados de la empresa minera; además, rehabilitaron el salón ejidal y colocaron tambos para la basura.
En Hecla la plantilla de obreros la integra el 40 por ciento de los habitantes de Vista Hermosa, afirmó Gabino Ibarra Contreras, comisario ejidal y también empleado de la planta minera.
Afirmó el dirigente campesino que este pueblo ha vivido de la minería, pues la agricultura en el semidesierto no es rentable, solamente siembran para el autoconsumo.
También admite que haya muchas carencias, como una clínica de salud, pues en el traslado de pacientes algunos han muerto en el camino dada la gravedad. Espera que en un futuro no muy lejano se podrá gozar de ese servicio; por lo pronto seguirán llevando a sus enfermos o accidentados a Cuencamé y Gómez Palacio.
Actividad
Los habitantes de Vista Hermosa viven de la minería; trabajan en la agricultura para el autoconsumo.
300
habitantes
tiene Vista Hermosa
40%
trabajadores
de la empresa Hecla son de Vista Hermosa
meses
cumplirá la huelga en la planta minera Hecla
FUENTE: Investigación de El Siglo de Durango.