EL SIGLO DE TORREÓN
Francisco I. Madero, Coah.- En la carretera al ejido Santo Niño abundan los deshuesaderos o ?yonkes?, que cada vez adquieren mayores dimensiones y amenazan con empeorar el aspecto de esta localidad.
Según un recorrido que se efectuó por esta vía de comunicación, se pudo constatar que dichos establecimientos cada vez están más cercanos a la carretera, por lo que las autoridades deberían regular su operación y establecer límites en cuanto a la ocupación de espacios.
Son tres o cuatro negocios de este giro los que se ubican a pie de carretera y no sólo exhiben partes de vehículos de todas marcas y modelos que están puestos a la venta, sino incluso automóviles completos que muestran en los medallones letreros de que se venden por partes, reflejando que ésta se ha convertido en una actividad que deja buenos dividendos a quienes la realizan.
En casi todos estos negocios se conservan también las chatarras de las unidades que han sido aprovechadas en todas sus piezas, algunas permanecen estacionadas junto a la carretera y han llegado a representar un peligro para que se registren accidentes, pues impiden la visibilidad sobre todo por las noches, ya que además ese tramo carretero carece de iluminación.
Algunos propietarios de vehículos recurren a estos negocios cuando requieren de alguna pieza para su unidad, como alternativa contra los altos costos que en ocasiones deben cubrir si acuden a las agencias automotrices o refaccionarias.
Sin embargo, también hay quienes ponen en duda la procedencia de las unidades que ahí se deshuesan, pues en ocasiones ingresan automóviles de modelos recientes que aparentemente están en buenas condiciones y no tendrían por qué ser vendidos en partes.