El Universal-AEE
MÉXICO, DF.- El papel de Dulcinea no le sienta bien a la cantante Susana Zabaleta. Si se trata de elegir, prefiere tomar el rol de Don Quijote y perseguir un ideal, con la misma consecuencia de la imagen literaria, que la llamen loca.
A la cantante le molesta que se piense a partir de su constante aparición en televisión como juez de Cantando por un sueño, que su lucha y su poder de seducir al público son nuevos. ?Siempre he cantado, desde que nací canto, no desde que soy juez?, menciona Zabaleta y desde que un día un padre se lamentó de que ella no fuera hombre, comenzó a andar sola por el mundo para luchar por respeto a la mujer por el simple hecho de serlo.
Susana Zabaleta le da un trago a un vaso de vino tinto, se quita las botas y acomoda su vestido para ponerse en posición flor de loto.
Reconoce que su forma de ser en muchos momentos se ha convertido en una tragedia.
?Pueden pensar que estoy loca y sí, lo estoy, pero tengo una familia que me apoya y no me va a meter al manicomio; mis amigos saben cómo soy y avalan mi palabra, saben que estoy loca pero me quieren así.
?Saben que tengo un ideal como Don Quijote y seguiré tras él?, dice con una seguridad a prueba de balas que remata con una sonrisa.
-A las mujeres que luchan, que levantan la voz y dicen las cosas como son les llaman locas?
-Es muy fácil decirle loca a la gente sin tomar en cuenta lo que ha pasado. ¿Qué se puede hacer? Siendo mujer y viviendo en México más vale que sepas bien quién eres, porque si no, te hacen añicos.
-¿Te ha dolido ser así, mujer de lucha?
-Muchísimo. Hay gente que me ha dado la espalda, hasta me han dejado de pagar. Alguna vez canté para un comercial de televisión y cuando fui a cobrarle al señor productor me dijo: ?Sí te pago, pero vamos a cenar? y le dije que no: ?Haz rollito tu dinero? entonces no me pagues?. El respeto se gana con la fuerza, la razón y creer en tus ideales.
-¿Estás convencida de que es muy difícil ser mujer?
-Ser mujer en México sí, ser mujer y ser de provincia es más difícil; que tu papá llegue y te diga: ?Qué inteligencia tienes, lástima que no fuiste hombre??
-¿Eso te lo dijeron?
-En algún momento. Me preguntaron: ?¿Qué quieres estudiar?, ¿por qué no a un kínder, eres educadora y te quedas aquí??. Yo dije: ?Éste no sabe qué tan inteligente soy? y pensé demostrarle a este ca?, que es mi papá, que voy a ser la única de sus hijos que no va a depender de él de ahora en adelante. En ese momento dejé de recibir dinero y a ganar el mío, desde entonces no me lo ha dado y a todos mis hermanos sí, y no sabes qué alegría.
-Participaste en varias campañas, ¿cuál crees la más importante para apoyar?
-La educación, la educación sexual a las niñas. Es muy fácil engañarlas, que aprendan a decir no y se les debe respetar, enseñarles que sus hermanos también deben recoger las cosas y hacerse de comer. No es feminismo, se trata de respeto.
El costo que ha pagado por ser mujer de lucha, Susana lo sintetiza con un ?¡Uff!?, y se ríe nada más por la inercia de evadir los malos recuerdos.
Cambia de tema y comenta que ?así es la vida?, que no bajará la guardia.
Su diccionario
Decidida a convencer a la gente de que sortear obstáculos es parte de la ?magia de estar vivos?, regresará al Lunario el 16 de marzo con el espectáculo De la A a la Z, donde hace mancuerna con Armando Manzanero para hablar de amor y de respeto.
-Una heroína: Jesusa Rodríguez, porque desde que la conozco ha pensado en defender a la mujer. La he visto enseñarle a prostitutas oaxaqueñas cómo vivir después de esa vida, luchar porque se conozca la obra de Sor Juana Inés de la Cruz.
-Ser mujer: Significa dar vida, no sólo tener un hijo sino dar vida al amor, a un orgasmo. Una mujer siempre tendrá sus brazos abiertos para un hombre, o muchos.
-Voz: La mía es un instrumento muy extraño. A veces abro la boca y digo cosas terribles o muy bonitas, va más allá de mi razón. Digo cosas que ofenden, digo las cosas tal cual son
-Cuerpo: También va más allá de mí. A veces me doy cuenta que hago cosas demasiado provocadoras o extrañas
FUENTE: El Universal-AEE
Su batalla
Desde que vivía en su natal Monclova, Coahuila, Susana Zabaleta ha tenido la intención de dar a conocer la situación extrema de los mineros del norte del país. Desde hace varios años ha trabajado en la búsqueda de apoyos para construir hogares dignos para quienes subsisten con tres mil pesos al mes
Después de la muerte de 65 mineros en Pasta de Conchos, su frente de batalla finalmente tuvo eco. ?Conseguimos por lo menos casas para las viudas, mujeres solas que se quedaron con tres o cuatro niños, para mí es un gran logro. Los que murieron van a ser héroes en un futuro, porque gracias a ellos México se va a dar cuenta de lo triste que han vivido y sus bajos sueldos?.