EL SIGLO DE TORREÓN
SAN PEDRO, COAH.- ?Lloraba mucho y me desesperaba. Yo le pegué para que se callara. Nunca pensé que lo que iba a pasar?, fueron las palabras con las que Martha Patricia Sánchez Mata, aceptó su responsabilidad ante el Ministerio Público sobre la muerte Alexis, su pequeño sobrino de tres años.
Una vez que Daniela Ramírez Villegas, agente en turno del Ministerio Público obtuvo la confesión de la inculpada, se procedió a concluir a averiguación previa levantada iniciada en su contra para consignarla al juez penal.
Fernando Adrián Olivas Jurado, delegado de la región Laguna II de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), informó que está en manos del juzgador determinar si le dicta o no auto de formal prisión a la mujer que mediante golpes, asesinó a su sobrino de tres años.
El funcionario de la PGJE explicó que existen indicios y evidencias suficientes para aseverar que las lesiones mortales que presentó el menor no eran producto de la casualidad ni de la suerte, sino más bien provocadas o inferidas.
Martha Patricia Sánchez Mata, de 23 años de edad, madre de dos hijos, una niña de seis y un niño de año y medio, fue señalada por su familia política como la probable responsable del deceso del pequeño Alexis, hijo de su hermana Nancy Araceli, de 24 años.
El delegado de la región Laguna II de la PGJE, recordó que los hechos se suscitaron el pasado domingo por la tarde, minutos después que a bordo de un auto particular, fue trasladado el menor desde el domicilio ubicado en avenida San Luis No. 65 de la colonia Barrio San Luis, al Hospital General de la Secretaria de Salud (Ssa).
El pequeño Alexis Sánchez Mata falleció poco después que ingresara al área de Urgencias del nosocomio, como consecuencia de una fractura de cráneo. La Policía Ministerial del Estado llevó en calidad de presentada a la tía del menor, Martha Patricia, para que rindiera su declaración en torno a los hechos donde resultó gravemente lesionado su sobrino.
Neurosis
La constante angustia de vivir alejada de su esposo, quien labora en Estados Unidos, así como de la responsabilidad de cuidar a sus dos pequeños hijos y al de su hermana, provocaron en Martha Patricia Sánchez Mata, una profunda depresión que terminó con la vida de un inocente.
Habitando una humilde vivienda de cinco por cuatro metros, en una finca propiedad de sus suegros, Martha Patricia se la pasaba todo el día encerrada, sin salir más que para comprar lo necesario. Hacia tiempo que se había distanciado de su familia política.
Nancy Araceli Sánchez Mata, hermana de la presunta homicida, se enteró del trágico acontecimiento, cuando le fueron a avisar hasta el centro de rehabilitación para adicciones donde se encuentra recluida. Ella se dedica al oficio más antiguo del mundo.
