ATAQUE | PIERRE GEMAYEL PIERDE LA VIDA JUNTO A DOS DE SUS GUARDAESPALDAS.
Aprueban creación de Tribunal Especial en el Líbano para juzgar a sospechosos de asesinatos políticos.
EFE
Beirut, Líbano.- El ministro libanés de Industria, Pierre Gemayel, hijo y sobrino de ex presidentes libaneses, fue asesinado ayer a balazos por tres hombres armados que acabaron, también, con la vida de dos de sus guardaespaldas.
La noticia fue primero comunicada por un grupo de diputados del bloque antisirio Fuerzas del 14 de marzo que irrumpió en una rueda de prensa de uno de sus aliados, Saad Hariri. El propio ministro del Interior, Ahmed Fatfat, comunicó la noticia a los asistentes y acusó públicamente al régimen sirio de estar tras el atentado.
Sin embargo, el Gobierno sirio se apresuró a condenar el atentado, antes que ningún otro país árabe: ?Este crimen terrible tiene el objetivo de atentar contra la estabilidad y la paz del pueblo libanés?, subraya la fuente, que destaca ?el interés de Siria en la seguridad, la estabilidad y la unidad de Líbano?.
El padre del ministro asesinado, Amin Gemayel, presidente del Líbano entre 1982 y 1988, se abstuvo de acusar a nadie en concreto y pidió al pueblo libanés que no salga a las calles a protestar por lo sucedido y que no se deje llevar por sentimientos de venganza.
Pierre Gemayel circulaba por el barrio de Chtaide cuando tres hombres interceptaron el coche y dispararon 24 balazos contra él, valiéndose de armas con silenciador, antes de darse a la fuga.
La televisión LBC mostró los cristales del coche con numerosos impactos de bala y con manchas de sangre en los asientos.
El chofer que conducía el vehículo del ministro, también herido, logró trasladar con vida a Gemayel al hospital cercano de San José de Daura, pero poco después falleció.
Inmediatamente, las televisiones libanesas mostraron un gentío que se agolpaba en las puertas del hospital para intentar ver el cadáver, entre escenas de cólera e indignación. Entre los que visitaron el hospital estuvo el embajador de Estados Unidos en el Líbano, Jeffrey Feltman.
Horas después el diputado para los asuntos del Parlamento, el también antisirio Michel Pharaon, salió ileso de un atentado perpetrado por un grupo de desconocidos que disparó contra el parlamentario desde un vehículo cuando transitaba por el barrio de Achrafie, en el centro de Beirut, según su oficina de prensa.
El grupo shii Jezbolá, en las antípodas políticas de lo que representaba Pierre Gemayel, también condenó con presteza el atentado y pidió ?que no se acuse precipitadamente a otra parte o a otro país? por el atentado, en palabras del jeque Hasán Fadalah, parlamentario de Jezbolá, en declaraciones a la cadena Al Arabiya.
La tensión era evidente dentro y fuera del hospital. Soldados del Ejército libanés ocuparon algunas calles, cerrándolas al tráfico, para evitar desbordamientos de la cólera popular.
En la región del Meten, de donde era originario el asesinado, los comercios cerraron y algunos testigos aseguran que había manifestantes en las calles que quemaron neumáticos en protesta por lo sucedido.
El presidente Emile Lahud, condenó el atentado y aseguró que iba dirigido contra todos los libaneses, anunció que suspendía los actos de celebración del Día de la Independencia libanesa previstos para hoy, así como los desfiles militares con esta ocasión.
El asesinato de Gemayel se produce en momentos en que las Fuerzas políticas pro y antisirias se encuentran más divididas que nunca. Los prosirios, encabezados por Jezbolá, habían anunciado manifestaciones en los próximos días en protesta por el bloqueo de las negociaciones por un Gobierno de unión nacional.
Mientras tanto, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó ayer la creación de un Tribunal especial en el Líbano para que juzgue a los sospechosos de la muerte del ex primer ministro Rafic al Hariri y otros asesinatos políticos cometidos en ese país.
La aprobación se produjo poco después de la adopción de una declaración presidencial de condena del asesinato Gemayel, conocido por su rechazo a la influencia Siria en el Líbano.
En una reunión, los quince miembros del Consejo de Seguridad dieron el visto bueno al establecimiento de este órgano judicial, que deberá enjuiciar a los implicados en la muerte de Al Hariri y de otros atentados perpetrados en el Líbano desde octubre de 2004.