El Siglo de Torreón
MATAMOROS, COAH.- Un elemento de Seguridad Pública fue acusado de abuso de autoridad, tras amenazar de muerte a tres jóvenes a punta de pistola. Juan Francisco y Salvador, de 20 y 16 años de edad, respectivamente, dos de los jóvenes amenazados, relataron lo sucedido.
Eran las tres de la mañana del sábado nueve de diciembre. Juan Francisco, acompañado por dos de sus amigos, entre ellos Salvador, caminaba por la calle Pabellón, pues deseaban cenar en una conocida taquería, ubicada en la esquina de la calle Pabellón y Carranza.
Metros antes de entrar al lugar, según relató Juan Francisco, un hombre, vestido de civil, se acercó y los amenazó diciéndoles, ?ahora sí pen... los voy a mandar a la v...?.
De inmediato, los jóvenes reconocieron al hombre, el cual meses atrás los había detenido por traer consigo unas botellas de cerveza, las cuales de acuerdo con los afectados, pretendían comprar pero fueron detenidos, sin alguna razón aparente. Los jóvenes identificaron al hombre como Luis Guerra, quien se desempeña como efectivo en la DSPM.
Según comentó el joven, el policía se acercó a su auto, en el cual viajaba su esposa e hijos, tomó y lo metió en la parte trasera de su pantalón para acercarse nuevamente a los afectados.
Para asustarlos, el efectivo sacó su pistola y les apuntó diciendo: ?los voy a matar pen... itos?. Los quejosos no pudieron hacer nada, hasta que uno de los comensales salió de la taquería para decirle, ?poli corrupto, déjalos ir, ellos no te han hecho nada?.
Fue entonces cuando el policía entró nuevamente a su vehículo y tomó el radio para pedir refuerzos. En cuestión de minutos, varias patrullas arribaron al lugar. Ahí detuvieron al joven que salió a defenderlos así como a uno de ellos.
?Nada más nos pasearon, pero no nos golpearon, lo único que nos dijeron es que ellos no eran unos policías corruptos y nos dejaron libres?, señaló Salvador, uno de los afectados.
Los jóvenes, al día siguiente, comentaron lo sucedido con sus padres. Fue Leticia Escobedo Marrufo, abuela de Juan Francisco, quien acudió a la DSPM a poner una queja en contra del efectivo, pero no fue posible ante la falta de personal.
Al día siguiente hicieron lo mismo, pero esta vez carearon a los jóvenes con el policía, quien argumentó que ellos molestaban y amenazaban con violar a una de sus hijas, cosa que negaron los acusados.
Ante la imposibilidad de interponer una denuncia ante la DSPM, Leticia Escobedo acudió, acompañada por los jóvenes, a la agencia del Ministerio Público a interponer una denuncia en contra del policía Luis Guerra.
?Tenemos miedo de lo que vaya a pasar después de esto, pero alguien tiene que hacer algo, si la ciudad está cambiando, que la Policía también lo haga?, señaló la abuela de Juan Francisco, quien no espera que den de baja al efectivo, ?sólo que quede un antecedente?.
