EL ORO, DGO.- De cada diez personas que son atendidas por padecer enfermedades crónico-degenerativas, siete son adictas al tabaco o conviven con personas y en lugares donde ese vicio es común, informó José María Salcido Reyes, director del Hospital Regional.
Señaló que en el municipio de El Oro la edad promedio en la que la gente comienza a fumar es a partir de los 13 años, ingresando de esta manera al amplio grupo de personas que, debido a la influencia maligna que el tabaco ejerce en el cuerpo humano, presentan deterioro en su calidad de vida.
Según la Organización Mundial de la Salud, el tabaco causa la muerte de tres millones de personas anualmente, lo que significa que ésta es la droga que más vidas cobra en el planeta y esto tiene mucho que ver con la excesiva publicidad que se le dio a los cigarrillos de todas las marcas por mucho tiempo, indicó.
El tabaco es una droga permitida, de ahí su accesibilidad en precio y proveedores en México; sin embargo, en comparación con países como Estados Unidos, se carece de una serie de leyes que regulen su consumo, sobre todo para evitar afectar a terceros.
De ahí que resulte común en Santa María del Oro ver personas fumando en escuelas, hospitales, oficinas, transporte y demás lugares públicos, sin dejar otra opción a quienes se abstienen del vicio más que inhalar el humo del cigarro indispuestamente.
El tabaco es tan dañino que por cada cigarrillo los latidos del corazón aumentan entre ocho y diez veces más, poniendo significativamente en riesgo al individuo de padecer enfermedades cardiovasculares, señaló Salcido Reyes.
De la misma manera, comentó que estudios médicos recientes indican que los vasos sanguíneos de la gente que fuma se gastan entre diez y 15 años antes de lo que ocurre en una persona que se abstiene del tabaco.
Así, cada cigarro fumado corresponde a una reducción de 15 a 20 minutos de vida con relación a una persona de hábitos relativamente normales, o dicho de otra manera, el consumo diario de un paquete de cigarrillos acorta seis años la expectativa de vida.
Refirió que el tabaquismo no es la causa directa de muchas enfermedades; sin embargo, es un factor determinante de morbilidad. Por ejemplo, quintuplica el riesgo de muerte por bronquitis crónica y enfisema, y lo duplica en el caso de enfermedades del corazón.
Abundó para dar una idea de la gravedad del peligroso vicio que en las autopsias de los fumadores que acostumbraban consumir alrededor de 20 cigarros al día durante unos 20 años se muestran pulmones negros con un promedio de seis kilogramos de humo.
Además de la nicotina, en el humo del tabaco se han identificado más de tres mil compuestos diferentes, de los cuales los más importantes son: a)alquitranes, en los cuales se han encontrado 47 sustancias carcinógenas y b)el monóxido de carbono, que produce hipoxia tisular y se relaciona con la arteriosclerosis, uno de los principales factores que desencadenan infartos en el miocardio.
Son muchos más los daños a la salud con que se encuentra relacionado el consumo de tabaco. Se han acumulado pruebas experimentales, epidemiológicas y clínicas que apoyan la asociación entre tabaquismo y morbilidad. La relación de la mortalidad para adultos fumadores contra adultos no fumadores es de casi uno a siete. Esta relación aumenta con la cantidad fumada y es directamente proporcional a la duración del tabaquismo. En suma, los efectos del tabaquismo sobre la esperanza de vida dan por resultado que ésta disminuye de manera significativa.
Crónicos
El tabaco genera adicción y, por tanto, los fumadores crónicos deben fumar un número determinado de cigarros cada día, entre 20 y 30, para mitigar la dependencia y evitar la ansiedad que produce la falta de las drogas, comentó José María Salcido Reyes, director del Hospital Regional.
En otro punto, agregó que fumar durante la etapa del embarazo puede dañar muy peligrosamente al desarrollo del feto, provocando el nacimiento de niños con severas afecciones o con un desarrollo interrumpido.
Además, cuando se fuma delante de otras personas se les convierte en ?fumadores pasivos? al obligarles a respirar aire contaminado, lo que también pueden ser causa de severos problemas respiratorios.
Anexo.
Muerte prematura
Fumar a edad temprana puede ser la causa de cáncer y muerte prematura.
-Por cada cigarro fumado, los latidos del corazón aumentan entre ocho y diez veces.
-Los vasos sanguíneos de la gente que fuma se gastan entre diez y 15 años antes que en una persona común.
-La mitad de las muertes de adictos al tabaco mueren por problemas cardiovasculares antes de los 40 años.
-Cada cigarro fumado corresponde a una reducción de 15-20 minutos de vida menos que una persona normal.
-El tabaquismo quintuplica el riesgo de muerte por bronquitis crónica y enfisema, y lo duplica en decesos por enfermedades del corazón.
-El consumo diario de un paquete de cigarrillos acorta seis años la expectativa de vida.
FUENTE: Hospital Regional de Santa María del Oro.
