El grupo islamista Hamas anunció que formará un Gobierno por su cuenta debido a la falta de apoyo de otros partidos.
JERUSALÉN (AP).- La economía palestina sufrirá un colapso y caerá en una depresión profunda si Israel y la comunidad internacional cumplen su amenaza de interrumpir la ayuda financiera cuando Hamas asuma el poder, advirtió el jueves el Banco Mundial.
En el peor de los casos, los ingresos personales se reducirían en un 30 por ciento y las tres cuartas partes de la población caería en la pobreza para el 2008, dijo el informe. Advirtió también que la Autoridad Palestina, el principal empleador de Gaza y Cisjordania, quedaría al borde del derrumbe.
"Suspender las transferencias de ingresos, limitar los movimientos y acceso de los palestinos y reducir el flujo de ayuda provocaría perjuicios económicos graves si se emplearan las herramientas disponibles con el suficiente vigor", dice el informe.
El trabajo pone de relieve el dilema que enfrenta la comunidad internacional con respecto al gobierno entrante de Hamas. Israel y Occidente quieren aislar a Hamas, al que califican de grupo terrorista, sin perjudicar a la población general.
Los palestinos dependen en gran medida de la ayuda internacional, que el año pasado fue de mil 300 millones de dólares. Los donantes occidentales, que envían la mayor parte de la ayuda, han amenazado con reducirla si Hamas no renuncia a la violencia.
Hamas se ha negado a adoptar posiciones más moderadas, y ha pedido ayuda financiera al mundo árabe e islámico. Al ganar las elecciones parlamentarias de enero, Hamas está completando la formación de un gobierno que espera asumir a fines de mes.
En su primera medida contra Hamas, el mes pasado, Israel congeló las transferencias de unos 55 millones de dólares en impuestos que recauda para los palestinos todos los meses.
Las transferencias de impuestos son esenciales para el presupuesto operativo de la Autoridad Palestina. El informe advierte que la interrupción de las transferencias "es incompatible con la continuidad de operaciones esenciales de gobierno".
Sin los fondos de este mes, la autoridad pagó los sueldos de sus 140 mil empleados el miércoles, con dos semanas de demora, gracias a la ayuda de emergencia de donantes europeos y árabes.
El derrumbe de la autoridad agravaría el caos en Cisjordania y Gaza. Los empleados de gobierno son generalmente los principales proveedores de sus familias.
HAMAS GOBERNARÁ SOLO
El grupo islamista anunció que formará un Gobierno por su cuenta debido a la falta de apoyo de otros partidos, a pesar de que podría profundizar su aislamiento internacional.
Hamas dijo que el Gobierno incluiría a tecnócratas y políticos independientes y adelantó que planea someter el gabinete el lunes a la aprobación del Parlamento Palestino.
Sin embargo, para presentar el Gobierno necesita el aval del presidente palestino Mahmoud Abbas, quien se reunirá la próxima semana con los milicianos islamistas.
Abbas tiene previsto solicitar a Hamas que reelabore su programa de Gobierno, dijo un funcionario cercano al presidente que habló en forma anónima porque no está autorizado a tratar el contenido de ese tipo de reuniones con periodistas. El mandatario dirá a Hamas que su plataforma radical es demasiado vaga y por tanto inaceptable, añadió el funcionario.
Hamas, que en las elecciones de enero ganó una mayoría absoluta en el parlamento, ha matado a centenares de civiles en ataques con bombas. Se ha negado a moderar su posición a pesar de las amenazas de Estados Unidos y la Unión Europea de suspender la ayuda a la Autoridad Palestina a menos que el grupo reconozca a Israel, renuncie a la violencia y acepte negociaciones de paz. El grupo es considerado un grupo terrorista por Israel, Estados Unidos y la Unión Europea.
El mayor escollo en las conversaciones en busca de un Gobierno de coalición ha sido la negativa
