Señalan que el problema del sistema de educación en México es: un currículum cargado y enciclopédico.
EL UNIVERSAL-AEE
México, DF.- En México las escuelas de educación básica tienen que cumplir, además del plan de estudios para el aprendizaje, con 75 programas más de apoyo para la mejora de la calidad como el de Lectura, Enciclomedia y Escuelas de Calidad, así como con estrategias para dar atención a grupos vulnerables, en lengua indígena, la incorporación de niños con alguna discapacidad, la formación de valores, la prevención de drogas, orientación sexual y seguridad, entre otros, que se combinan con celebraciones como el día del árbol, del estudiante y de la lectura.
Lo que implica que en caso de atender todos estos programas, un maestro sólo puede destinar alrededor de 2.8 días de clases en promedio al año a cada uno de ellos, según un estudio de la SEP.
Si los maestros y directores se propusieran atender todos estos programas y enseñar a los niños los materiales, libros y monografías de todos ellos, sólo se destinarían poco más de 14 horas al año para aprender los conocimientos básicos de las matemáticas, lectura y ciencias, además de la importancia del uso, conservación y tratamiento del agua, del manejo ambiental, la prevención de las drogas, la violencia intrafamiliar, la orientación sexual y la participación democrática, entre otros.
Tras el recuento que la propia Secretaría de Educación Pública (SEP) realizó sobre la carga de trabajo de los maestros en el aula, el subsecretario de Educación Básica, Lorenzo Gómez-Morín Fuentes, dice que además de las dificultades que existen para que los niños puedan aprender lo establecido en el programa de estudios con sus libros de texto gratuito, ?siempre se le quiere cargar o encargar a la escuela nuevas responsabilidades en asuntos coyunturales locales, nacionales o regionales?.
En los últimos años, por ejemplo los maestros han tenido que tomar un tiempo de los 220 días del calendario escolar para explicar los ataques terroristas del 11 de septiembre en los Estados Unidos y luego en España y Gran Bretaña, los enfrentamientos diplomáticos de México con Cuba y Venezuela, el proceso de desafuero en contra de quien fuera el jefe de Gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador, o el linchamiento de policías federales en Tláhuac.
Pero también actos conmemorativos como el que este año el ciclo escolar estuvo dedicado a resaltar la imagen de Benito Juárez o a conmemorar el 500 aniversario de la edición de El Quijote.
?Este es el problema del sistema de educación en México: un currículum cargado y enciclopédico?, califica Roberto Rodríguez Gómez, miembro de la junta directiva del INEE.
En este escenario, el también investigador del Centro de Estudios sobre la Universidad (CESU) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) afirma que ?se requiere realizar una discusión en torno al contenido de los programas de estudio. Un equilibrio y definición de espacios para la discusión y análisis de los temas que son de mayor impacto social como el consumo de drogas o estupefacientes, la violencia, la promoción de valores, la participación ciudadana y otro tantos que se le cargan a la escuela?.
El subsecretario Gómez-Morín Fuentes señala que el problema no es sólo es ?sobrecarga? de temas y actividades en la escuela, que también llegan por parte de otros sectores de la administración pública o grupos y empresas particulares, ?que organizan concursos o actividades en torno de las escuelas?.
?Tiene que ver la capacitación del maestro, en qué momento el profesor se prepara para entender y aplicar tal o cual estrategia. El único que tiene la responsabilidad de articular esos 75 programas en el aula, ahí frente a los niños es el maestro, y además se le exigen buenos resultados de todos?.
