AP
ARIZONA, EU.- El presidente George W. Bush no se cansa de repetir que los demócratas son demasiado blandos en la lucha contra el terrorismo. Pero su mensaje con fines electorales está siendo acallado por el escándalo en torno al comportamiento de un legislador republicano y la respuesta de su partido.
A medida que se acercan las elecciones de noviembre, en las que los demócratas aspiran a quitarle a los republicanos el control del Congreso, Bush trata de enfocar toda la atención en la economía y la batalla contra el terrorismo.
Su mensaje, no obstante, está pasando a segundo plano, relegado por el escándalo acerca de la conducta del representante Mark Foley, quien renunció a su banca tras revelarse que había enviado mensajes eróticos por Internet a un mensajero, y al manejo de la situación por parte de los líderes republicanos de la Cámara Baja.
Un factor determinante es cuándo se enteraron los líderes partidarios del comportamiento de Foley, y con qué celeridad actuaron. Bush condenó el comportamiento de Foley, pero defendió al líder de la Cámara Baja, Dennis Hastert, cuya renuncia solicitan algunos.
Estrategas republicanos temen que el escándalo pueda desalentar a los votantes republicanos y Bush está empeñado en asegurarse de que van a las urnas.
?El presidente se ha concentrado en estos actos de recaudación de fondos, en los que transmite su mensaje presentando las opciones filosóficas que tienen los votantes en noviembre, especialmente en los referente a la economía y a la lucha global contra el terrorismo?, declaró la subsecretaria de prensa de la Casa Blanca Dana Perino el martes.
En presentaciones en California para impulsar las candidaturas de los representantes Richard Pombo y John Doolittle, Bush criticó a los demócratas que se opusieron a un proyecto de Ley que autorizaba la intercepción de comunicaciones telefónicas y por Internet sin autorización judicial y a otro que contemplaba métodos de interrogación severos para sospechosos de terrorismo.
?Los demócratas quieren siempre estar bien con Dios y con el diablo. Hablan de actuar con firmeza ante el terrorismo, pero cuando se cuentan los votos, aparece su lado blando?, afirmó Bush.