Se altera programación en la industria de la construcción por aumento de insumos y desabasto.
El Siglo de Durango
La inestabilidad en los precios de algunos de los principales insumos para la industria de la construcción provoca alteración en la programación de diversas obras, reconoce Tomás Flores Rangel, vicepresidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) en Durango.
Luego de la situación que se vive en el país a raíz del conflicto minero, los precios de insumos metálicos tales como la varilla, alambrón, alambre recocido y cobre se han incrementado de manera considerable. Pero además del costo elevado, el sector de la construcción del mismo modo enfrenta un severo desabasto.
?El mercado tiene un desabasto importante en la producción de acero. Una cosa es el valor y la otra es que hay cosas que están muy limitadas?, dice el entrevistado.
En el caso de la obra pública explica que el presupuesto de una entidad-ya sea estatal o federal-, se transcribe a través un análisis de precios unitarios. ?Obviamente, dependiendo de la fecha en que se contrate, eso tiene que ver con un sistema de actualización de precios y la ley establece que cuando ese incremento de los materiales no rebasa el 5 por ciento no le pagan lo que se llaman escalatorias; sin embargo, consideramos que bajo estas circunstancias ese 5 por ciento prácticamente en todas las obras que tienen aceros se van a disparar?.
Las afectaciones son, pues, para la obra de vivienda y la industrial en principal medida. Y aunque la obra carretera podría verse menos dañada, a su vez, hay un incremento importante en los asfaltos a raíz de la circunstancia que se vive en Irán ante un ataque norteamericano, lo cual causa inestabilidad en los mercados petroleros.
?Lo que pasó en Pasta de Conchos fue lo que detonó la problemática, posteriormente cerraron Sicartsa. En el ámbito internacional China sigue consumiendo, derivado del crecimiento de su infraestructura instalada, un consumo internacional de cantidades muy importantes de acero. Se ha llegado a un tope prácticamente del 100 por ciento del costo de la varilla en los últimos tres meses, que consideramos que se va a estabilizar en los próximos dos o tres meses?, narra.
?El acero, en el sistema tradicional que generamos en el país, en una construcción normal lleva alrededor desde un 15 al 25 por ciento del costo total de la obra pero en obras de infraestructura industrial, donde la infraestructura, los castillos, las columnas, las vigas son de acero, allí llega a repercutir alrededor de hasta el 70 por ciento del costo total de la obra?, glosa.
?Hablamos de la varilla pero el acero es mucho más amplio, estamos hablando de acero estructural para muros, laminados que se usan en techos. Por ejemplo, una nave industrial se hace prácticamente de acero y su inversión prácticamente se está duplicando?, añade.
Flores Rangel comenta que a finales empezó la desestabilización de los precios y a partir de ese momento el costo del acero fluctúa de manera permanente.
?Es el tubo galvanizado, el cobre, los conductores es una serie de productos aleatorios que han tenido esas mismas variaciones de precios. Se habla del acero porque es el que más se consume pero también suben otros?, remarca.
Problemática
El precio de la varilla en México aumentó en las últimas semanas hasta alcanzar su máximo histórico debido al conflicto en la Siderúrgica Lázaro Cárdenas las Truchas (Sicartsa).
-Según se dio a conocer en el ámbito nacional, el precio de la varilla acumula un incremento del 40 por ciento y se espera que la tendencia a la alza se mantenga.
-Dicha situación repercute directamente a la industria de la construcción.
-Sicartsa tiene una producción anual de un millón de toneladas y una participación del 30 por ciento del mercado mexicano.
-Tomás Flores Rangel, vicepresidente de la CMIC en Durango, afirma que también influyen algunas cuestiones del mercado internacional para esta alza en los precios de la varilla y que no sólo es este material el afectado.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Durango.
