ACCIONES| EL MUNDO NECESITA MÁS FONDOS Y PLANES REALISTAS PARA FRENAR LA EPIDEMIA.
A 25 años de que se detectó la enfermedad, sesenta y cino millones de personas han sido infectadas.
El país
Nueva york, eu.- ?El Sida está ganando la batalla?. Con esta frase pronunciada por Peter Piot, director del programa de la Organización de las Naciones Unidas contra la enfermedad, Onusida, comienzó en Nueva York una Asamblea especial dedicada monográficamente a la epidemia.
El último informe muestra que en el año 2005 no se ha cumplido ninguno de los objetivos establecidos por la ONU hace cinco años.
En los 25 años que han transcurrido desde que se identificó la enfermedad del Virus de Inmunodeficiciencia Humana (VIH), que ha infectado a unos 65 millones de personas, de los que han muerto unos 25 millones.
La cifra total de afectados continúa estancada desde 2004 alrededor de los 38.6 según las últimas estimaciones. Este número se debe a tres factores. Por un lado, algunos países -muy pocos, como Uganda o Tailandia- han conseguido frenar la epidemia. Por otro, en el continente más castigado, África, el virus ha saturado ya los países más afectados.
La enfermedad no crece porque ya ha alcanzado su máximo (tasas de más del 30 por ciento de los adultos infectados en Lesotho, Botsuana, Malaui o Suazilandia). Por último, las mejorías en los sistemas de cálculo han permitido ajustar los datos.
Financiamiento
Sólo el tema en teoría más espinoso, el del dinero, ha alcanzado las expectativas: el año pasado se destinaron siete mil millones de euros, una cifra que está dentro de las expectativas de entre cinco 500 millones y siete mil 800 millones que la ONU calculó que necesitaría. Pero hasta ese logro parece un espejismo. La enfermedad se prepara para salir de África y las necesidades se multiplican.
Para este año se necesitarán casi doce mil millones, de los que sólo hay comprometidos siete mil millones. En 2008, harán falta más de 17 mil.
Tratamientos
El plan para que tres millones de personas (la mitad de los que la necesitan) de los países en desarrollo recibieran medicación en 2005 se ha quedado en menos de la mitad (1.3 millones). Ello supone un avance frente a los 240 mil de 2001, se consuela la Organización de las Naciones Unidas (ONU), pero indica la pérdida evitable de miles vidas al año. En el futuro, la demanda aumentará en número y en calidad.
Los medicamentos conseguidos a bajo precio de los laboratorios tienen que ser complementados o sustituidos por otros más avanzados, y la industria se resiste a ceder las patentes.
Los Niños
Los menores son dobles víctimas del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (Sida). El 26 por ciento de los hijos de madres con el VIH lo hereda o lo adquiere durante la lactancia. Esta transmisión sería fácilmente evitable con un tratamiento de las madres y suministrando leche maternizada que evite que los niños tengan que mamar.
La ONU quería que este porcentaje hubiera bajado diez puntos desde 2001. El objetivo sólo se ha cumplido en 11 de los países más afectados. Además, casi 14 millones de pequeños han perdido a su padre, su madre o a ambos por culpa del Sida. Ello les obliga a abandonar la escuela para atender las tareas domésticas, para cuidar a familiares enfermos o para buscar el sustento del resto de su familia.
Las Mujeres
Las mujeres ya son más de la mitad de las afectadas. Y la proporción va en aumento. La muerte de sus parejas obliga a muchas a prostituirse para salir adelante. En esta situación, muchas veces consiguen mejores precios si mantienen relaciones sin preservativo. Ni siquiera el matrimonio las salva.
Aparte de las que son violadas por otros miembros de la familia, muchas veces es el propio marido infectado es el que les transmite el virus. Además, son las primeras en abandonar la escuela cuando la familia está en apuros, y las últimas en ir al médico si esta atención cuesta dinero.
Muchas sólo se hacen la prueba del Sida cuando están embarazadas. La ONU quería que, ante un diagnóstico positivo, el 80 por ciento recibiera tratamiento. El resultado es que sólo lo consigue un pobre nueve por ciento.
El conocimiento
Saber cómo se transmite el Sida y cómo se previene es la base de toda actuación futura. Pero el mensaje no llega a los jóvenes. La ONU quería que a estas alturas, el 90 por ciento tuviera la información suficiente. Ningún país lo ha conseguido. La media mundial está en el 33 por ciento de los chicos (el máximo, el 70 por ciento, revela que hasta en los países con mejores campañas un 30 por ciento de los jóvenes no sabe cómo protegerse). Entre las chicas, más vulnerables biológica, social y culturalmente, el porcentaje no llega al 22 por ciento.