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México, DF.- En los seis años del Gobierno del presidente Vicente Fox se ahorrarán más de 348 mil millones de pesos ó cuatro por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) gracias al manejo de la deuda y a la reducción del costo financiero.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) destacó que estos recursos están ahora disponibles para el sector privado, ya que al absorber menos recursos de los mercados de crédito, el sector público deja más recursos para las personas.
En el Informe Semanal de su Vocería, la dependencia comentó que ahora hay un menor costo que en el pasado: En 2000 el gobierno demandaba 66 pesos de cada 100 pesos disponibles para financiamiento; hoy, en cambio, sólo requiere 14 pesos.
?El éxito de la política de deuda pública de la actual administración puede observarse en las mayores oportunidades de consumo e inversión que tienen los mexicanos, y en que ésta, la deuda pública, ya no es un factor de vulnerabilidad en las finanzas públicas ni un asunto angustiante para la población?, agregó.
En la tercera parte de la nota informativa ?Los cinco mayores logros en política fiscal en esta administración?, señaló que la política de deuda en esta administración se orientó a reducir el peso de la deuda externa y aumentar los plazos de la deuda interna (migración a deuda interna).
Respecto a la adecuada política de deuda, señaló que desde 2004 se han planteado metas anuales de reducción del endeudamiento público externo de al menos 500 millones de dólares al año y el financiamiento en moneda local se lleva a cabo en instrumentos a tasas de interés fijas de 3, 5, 7, 10, 20 y, posiblemente, 30 años.
Agregó que en 2005 se pudieron comprar reservas internacionales al Banco de México por un monto de dos mil 878 millones de dólares, y junto con otras operaciones de pago, se pudo asegurar cuatro mil 767 millones de dólares, suficientes para hacer frente a los vencimientos de deuda externa en 2006 y 2007 en su debido momento. Además, señaló, se llevaron a cabo dos ofertas de instrumentos llamados warrants en mercados financieros internacionales, lo que contribuyó a acelerar el proceso de migración a deuda interna y fortalecer la confianza internacional en nuestro país. Las dos ofertas fueron exitosas al obtenerse una demanda de casi 11 mil 500 millones de dólares y mil 500 millones de euros por estos instrumentos, con una participación de más de 60 inversionistas institucionales norteamericanos, europeos y nacionales.
La SHCP refirió que el pasado 7 de septiembre venció una de las series de la primera emisión de warrants (realizada en 2005), ejerciéndose la totalidad de tales instrumentos. Con esta acción se intercambiaron 408.2 millones de dólares por cuatro mil 954.2 millones de pesos de deuda pública.
Además, se llevó a cabo una oferta de recompra y cancelación anticipada de títulos externos de mercado, y emisión de un nuevo bono global en mercados financieros internacionales que vence en 2017.
El monto de esta operación fue de tres mil millones de dólares, con un diferencial de apenas 105 puntos base sobre bonos equivalentes del Tesoro norteamericano; la brecha más corta que ha conseguido el gobierno Federal en la historia.
Finalmente, el gobierno amortizó anticipadamente créditos contratados con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial (BM) por aproximadamente nueve mil millones de dólares.
La SHCP apuntó que los recursos para realizar ese pago se obtuvieron de la compra de 12 mil 451 millones de dólares de la reserva internacional del Banco de México, a través de la colocación de Bonos de Desarrollo (Bondes D) del gobierno en el mercado local. Esta operación permitirá ahorros a valor presente por más de 600 millones de pesos en el costo financiero de la deuda pública.
Además, a principios de agosto de 2006 se realizaron operaciones de cancelación anticipada de bonos soberanos emitidos en los mercados internacionales por tres mil 379 millones de dólares, financiadas con los recursos provenientes de la compra de divisas a Banco Central.
Resaltó que una vez concluidas dichas operaciones, la deuda externa neta del gobierno pasará de 7.0 a 5.4 por ciento del PIB y como porcentaje del total pasará de 35.2 a 27.3 por ciento, y reducción en el saldo de la deuda externa por 12 mil 379 millones de dólares. A principios de este gobierno representaba más de 50 por ciento de la deuda pública total.
