El Siglo de Durango
La casa de Jesús Salazar se inundó medio metro, sus muebles amanecieron en medio de una laguna. El padre de familia expresó al El Siglo de Durango que se ha cansado de denunciar a las autoridades municipales el tiradero de escombro que hace la ciudadanía, tapando así los desagües naturales que convierten su calle en una alberca de aguas sucias.
?Voy más a Obras Públicas que a misa?, expresó don Jesús, quien demanda a las autoridades que retiren el escombro que dejan las construcciones aledañas y, ?aunque sea?, que le emparejen su calle.
La vivienda de don Jesús se encuentra en la calle María Bermúdez de la colonia 22 de Septiembre, frente al gimnasio del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), de la Sección 12, gremio que tampoco ha hecho nada por la colonia.
Este miércoles por la mañana, hizo un llamado a las autoridades, ya que no podía salir de su casa. Por fortuna, llegaron trabajadores de Servicios Públicos además de unidades de Protección Civil que ayudaron a que el agua saliera y no se registraran daños mayores.
Comentó que desde hace mucho tiempo sufren por las inundaciones e inclusive sus vecinos tienen bordos en las entradas de sus casas para que el agua no pueda entrar en temporada de lluvias.
Explicó que el agua tiene un cauce natural, y proviene de la calle Pino Suárez, que seguía su ruta a donde era la Acequia Grande.
Señaló que sí hay alcantarillas en la zona, pero la basura y el escombro las tapan, ocasionando escenas como las antes descritas cada vez que cae agua.
Don Jesús, quien se dedica a la carpintería, platicó que se tiene que buscar una solución al problema, pues no pueden vivir así. Expresó que tampoco han recibido ayuda ni colaboración de los dirigentes del sindicato de maestros, quienes utilizan la calle como estacionamiento público.
LUGAR DE VÁNDALOS
Sobre esta misma calle María Bermúdez, se encuentra una casa abandonada, en donde se reúnen vándalos y hacen actividades ilícitas, según comenta Jesús Salazar.
El Siglo de Durango acudió a esta vivienda que está en obra negra, se encontró llena de basura y excremento de caballo, así como restos de aves, envases de botellas quebradas, empaques de pastillas y papel aluminio, que se presume utilizan para consumir la droga conocida como ?cristal?.
El carpintero denunció que hace como un año salvó a una joven de que fuera violada en este lugar, pues un grupo de muchachos, al parecer bajo los influjos de una droga, trataban de ultrajarla.
Sin embargo, al escuchar sus gritos, acudió al llamado de la joven, que en su oportunidad se dio a la fuga.