Después de cinco años de ausencia motivada por mi ejercicio profesional de distribuidor de películas, regresamos a Torreón en julio de 1964, coincidiendo la ubicación de nuestro domicilio frente al de Luis y Anita Amarante, quienes desde entonces y hasta ahora son dilectos amigos nuestros, siendo tal circunstancia origen de algunos hechos de nuestra vida, el más importante por su trascendencia, el ingreso nuestro al Club Sembradores de Amistad de Torreón.
Por Luis conocí de la existencia de este club de amigos y por propuesta de él ingresé a sus filas, hecho que cambió mis horizontes, dándome oportunidad de conocer a muchos personajes de la vida social y activa de Torreón que al tiempo son gente que admiro, aprecio y siento orgullo de ser su amigo. Además ser socio del ahora Club Sembradores de Torreón, me ha dado la oportunidad de servir a la institución en diversos cargos directivos, inclusive, en el periodo 1990/91 la presidencia de su Consejo, secretario operativo del comité de becas durante catorce años y pergeñador de esta columna desde 1992.
Desde antes de ingresar al Club Sembradores, a invitación de los Amarante, habíamos participado en sus festejos de Navidad, en los que se presentaban en el gran salón del Casino de La Laguna, cuadros artísticos de verdadera manifestación de ingenio y alarde escénico con actuación de los propios socios. ¿Quién no recuerda el concurso de bailes internacionales o la imitación de programas televisivos o aquella corrida de toros con sus simulados tendidos, con manolas ataviadas a la usanza española, en la que como primer matador Nacho Obeso hizo una creación o aquella película filmada en los ?sets? cinematográficos en el Peñón de Velardeña, en el que participaron Pepe y Angélica Amarante, Santiago y la Nena Garza, Meme y Melita González, Roberto y Chayo Villarreal, Salvador y Veva Valencia y otras personas más o la pastorela Angelitos contra Demonios con la actuación inolvidable de Homero del Bosque?
Así pasaron muchos festejos y muchos años, hasta llegar la cena navideña del jueves anterior, en que con diversos disfraces algunos de nuestros socios representaron a parejas famosas: Chuy Campos y Alma Rosa a Mickey Mouse y su Mimí del alma; Nacho y Laurita Pámanes de Santa Claus y su ¡esposa!; Cándido y Ana Tere García de Arlequines; Jorge y Gaby Guajardo de los Peluche; Jorge y Alma Garza de Dart Vader y la Princesa Lea de la Guerra de las Galaxias; Arturo y Mague Rivera de Horacio y Morticia de los Locos Adams: Jesús y Ángeles de Lara de Andy y Raege Raggedy Ann; Hugo y Chacha García de Batman y Batichica; Toño y Licha Fernández de El Fantasma de la Ópera y Cristine (la soprano motivo de su pasión) y algunos otros que escapan a mi vetusta memoria, pero todos ataviados con mucha propiedad y elegancia, merecedores sin distinción del primer premio.
Hoy, en San Pedro Apóstol a las veinte horas nuestra Misa de Acción de Gracias y después, en el salón anexo, a disfrutar de los ricos tamalitos y el champurrado de rigor. Después... hasta el próximo año para proseguir en nuestro empeño de sentir y promover la amistad.
