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MÉXICO, DF.- De incorporarse una tasa única al Impuesto Sobre la Renta (ISR) a personas físicas en próximas misceláneas fiscales, el resultado sería una lluvia de amparos, señaló la firma consultora KPMG.
En entrevista, el socio de Impuestos de la firma, Manuel Rico, explicó que los amparos se suscitarían debido a que una tasa única no cumple con el principio de proporcionalidad, y por lo tanto es anticonstitucional.
En su opinión las personas físicas no pueden cumplir este principio, porque sólo pagan impuestos en función de sus ingresos y no pueden deducir absolutamente casi nada, acaso gastos médicos en algunas ocasiones. En cambio, las empresas que sí tienen tasa única pueden quitar todos los gastos en los que incurre para generar el negocio y pagar impuestos sólo sobre sus utilidades.
Destacó que el principio de proporcionalidad sólo se cumple si existe una tarifa como la que opera actualmente, cuando hasta cuatro salarios mínimos no pagan impuestos. La empresa consultora expone que de acuerdo con los tribunales, la única forma de respetar el derecho de proporcionalidad, es que la tasa vaya aumentando conforme crezcan los ingresos, de lo contrario ?lloverían? amparos.
Dijo que lo más probable es que atendiendo a toda la doctrina que existe en los tribunales, declaren inconstitucional una medida como esa. Respecto al Proyecto de Presupuesto para 2007 en términos fiscales, el especialista fiscal afirmó que técnicamente no existen grandes cambios y sólo se están cerrando algunos puntos tributarios, como el ajuste al Impuesto al Activo.
Señaló que fue un paquete conservador, toda vez que ya no es la propuesta fiscal integral que muchos están esperando, ?más bien ésta se va negociar el próximo año?.
Impuesto a refrescos
De proceder el impuesto de cinco por ciento que busca aplicar la SHCP a los refrescos que utilicen azúcar o fructosa, las grandes embotelladoras del país podrían amortiguar esto absorbiendo parte del gravamen y parte trasladándolo al precio al consumidor final, coincidieron en señalar analistas del sector bebidas y alimentos.
?En un año que se espera que la economía siga fuerte (2007), el impacto del impuesto para las empresas sería bastante pequeño o marginal. Sería distinto para cada una, para quienes están amparados (contra el IEPS de 20 por ciento) no les beneficia, al contrario, les va pegar, para los que no están amparados el beneficio que esperaban de que se quitara el impuesto va a ser menor?, comentó Mauricio Brocado, director de análisis de Casa de Bolsa Actinver.
Agregó que para las embotelladoras de Coca Cola en particular, el problema si se amplía si se tiene en cuenta que para el próximo año tendrán que enfrentar el aumento en el precio del concentrado que aplicará The Coca Cola Company.
?Se juntaría una cosa con la otra, definitivamente el impacto no es positivo, pero tampoco es el 20 por ciento de IEPS que tiene la fructosa?, indicó.
Brocado descartó que un ajuste en el precio de los refrescos vaya a afectar el comportamiento en los volúmenes de venta de la industria, los cuales han mostrado tasas de crecimiento atractivas desde hace varios trimestres.