EL SIGLO DE TORREÓN
Torreón, Coah.- ?Mamá, mamá, te estás quemando?, dijo la pequeña Carolina a su madre que luego de su trabajo nocturno en una fonda dormitaba en la sala. Al despertar la mujer vio cómo el fuego ya se había propagado por toda la casa y alcanzó a salir con la menor de seis años.
Con paredes de ladrillo pero con techo de cartón y madera, la finca ubicada en el número 861, de la privada Del Sol, de la colonia Eduardo Guerra se convirtió a las llamas. María Graciela López Enríquez, de 30 años perdió todas sus pertenencias.
Los vecinos de inmediato auxiliaron a la madre y su hija. Empleados del Ayuntamiento que llevaban una pequeña pipa utilizaron su agua para controlar el siniestro y buscar que no se propagara. Minutos después llegaron los Bomberos de la estación sur.
Decenas de curiosos se aglomeraron en la esquina de la avenida Quinta y la calle H, de la citada colonia. De una escuela cercana también salieron alumnos, entre ellos Julio y Brenda, de ocho y 12 años, hijos de María.
Personal de la Cruz Roja llegó al lugar del incendio y atendió a la ama de casa y trabajadora que tenía quemaduras de primer grado en brazo derecho y el omóplato y que además padecía de una crisis nerviosa.
La sala, las recámaras, la cocina, ropa diversa, electrodomésticos y demás artículos quedaron inservibles ante el paso del fuego que inició cerca de las 10:30 horas.
Abandonada desde hace meses por el padre de sus hijos, María Graciela recibió apoyo moral de su suegra que vive cerca de la finca incendiada.
Entre los vecinos del lugar manifestaron que buscarían la forma de brindar apoyo a la joven madre para ayudarle a limpiar el lugar y buscar apoyos para hacerse de nuevo de lo necesario para su hogar.
Los Bomberos manifestaron que no se estableció la causa del incendio que tomó a la dueña de la casa dormida y que pudo terminar en una tragedia.
