Un miliciano palestino murió en un tiroteo con la Policía de la ANP que intervino para impedir el secuestro de un extranjero en Gaza.
Jerusalén, (Notimex).- Un fuerte enfrentamiento se desató hoy en una prisión de Jericó en Cisjordania al ser asaltada por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), que exigen la entrega de cinco prisioneros acusados de asesinar a un político israelí en 2001.
El hecho inició esta tarde cuando las FDI, apoyadas por vehículos y tractores, rodearon una prisión de Jericó abriendo fuego y exigiendo con altavoces la entrega de cinco presos acusados de matar al político israelí Rehavam Zeevi en 2001.
Como parte de los intentos para hacer salir a los prisioneros por la fuerza, las FDI además de lanzar fuego contra el inmueble golpeaban las paredes del mismo con los tractores, de acuerdo con reportes del sitio web del diario "Haaretz Daily".
Uno de los cinco presuntos implicados en el asesinato de Zeevi es Ahmed Saadat, líder del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP).
La acción, que según las FDI tiene el fin de trasladar a los detenidos a una prisión de Israel, se realizó en respuesta al anuncio del presidente palestino Mahmoud Abbas que realizó la semana pasada sobre el objetivo de liberar a Saadat, ante el enojo de Tel Aviv.
El ataque de las FDI fue respondido por las fuerzas palestinas dando lugar a un severo intercambio de fuego, mientras que los residentes de Jericó que comenzaron a rodear la prisión intentaban impedir los ataques al inmueble lanzando piedras a los soldados.
El ejército israelí señaló que hay unos 200 detenidos en la prisión, de los cuales se han entregado alrededor de 44 que han salido incluso en ropa interior y que han sido golpeados, vendados de los ojos y trasladados a un lugar desconocido por las FDI.
Varios más permanecían en el interior del inmueble al negarse a salir, a pesar de los golpes que amenazan con echar abajo las paredes de la prisión que estaba bajo vigilancia de monitores estadunidenses y británicos que se retiraron antes de la llegada de las FDI.
"El objetivo es arrestarlos, pero no estamos negociando nada, así que si no salen los matamos", afirmó un coronel de las FDI que participa en el ataque que ha desatado la indignación de los palestinos y su gobierno, de acuerdo con el reporte.
Un oficial de las fuerzas de seguridad palestinas dijo que uno de sus compañeros y un prisionero han sido abatidos por las FDI en el marco del asalto que llevó a una airada reacción por parte de residentes y militantes de Jerico.
Abbas ha señalado que los estadunidenses y británicos, que monitoreaban la prisión y que la abandonaron antes del ataque, son "totalmente responsables" del sorpresivo asalto de las FDI que ha convertido en campo de batalla a Jerico y Gaza.
Presa de la indignación y en protesta por el ataque a la prisión, militantes palestinos ingresaron y prendieron fuego a las oficinas del Consejo Británico en Gaza, al tiempo que quemaban los vehículos que se encontraban en los alrededores.
El enfrentamiento se extendió cuando guardias de seguridad y la policía palestina intentaron impedir que los indignados militantes ingresaran en las oficinas del Consejo Británico, de acuerdo con reportes de la televisora israelí.
SE DESATA VIOLENCIA
Un miliciano del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) murió hoy en un tiroteo con la Policía de la ANP que intervino para impedir el secuestro de un extranjero en Gaza, informaron fuentes policiales.
En el día de hoy al menos once extranjeros han sido secuestrados en Cisjordania y Gaza por milicianos del FPLP, en respuesta al asalto a la cárcel palestina de Jericó por parte del Ejército israelí que quiere apresar a seis dirigentes de ese grupo, entre ellos su líder, Ahmed Saadat, encarcelados en ese centro penitenciario.
Israel considera a Ahmed Saadat el instigador del asesinato de un ministro israelí de Turismo en 2001.
Los extranjeros secuestrados son dos franceses y dos francesas, dos británicos, dos coreanos, un estadounidense, una australiana y un suizo.
Tras esta ola de secuestros, la jefatura de la Policía palestina ha dado orden a sus agentes de disparar para impedir nuevos raptos.
