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SAITAMA, Japón.- Se miran de lejos y se hacen ojitos, pero no de enamorados. Con un nuevo triunfo en la segunda ronda, Argentina y España parecen encaminados a una cita inevitable en las semifinales del Mundial de Basquetbol.
Ambos dieron el primer paso en la relación el sábado con sus respectivos triunfos en la inauguración de la segunda ronda. Argentina derrotó 79-62 a Nueva Zelanda y España despachó 87-75 a Serbia-Montenegro.
Antes de llegar al altar, los argentinos bailan el martes en cuartos de final con una aguerrida Turquía, que superó 90-84 a Eslovenia, y los españoles intercambian flores ese mismo día con Lituania, verdugo de Italia con un 71-68. El resto de los octavos de final sale a escena el domingo con los partidos Grecia-China, Francia-Angola, Estados Unidos-Australia y Alemania-Nigeria.
De ese grupo, tan sólo Alemania y Grecia pintan como peligro para los estadounidenses, que podrían toparse con el primero en cuartos y con el segundo en semifinales. Emanuel Ginóbili volvió a brillar por Argentina y pulió su ya brillante resumen internacional.
El escolta de los Spurs de San Antonio anotó 28 puntos y en los momentos que Nueva Zelanda apretó en el juego físico sacó músculo por la escuadra albiceleste. ?Manu? tuvo de copiloto a Fabricio Oberto y sus 23 tantos.
Argentina salió al tope a pesar de fallar 17 de 18 intentos triples, uno de sus sables de batalla. El único canasto de larga distancia fue cortesía de Ginóbili, que además hizo una asistencia y tres robos.
La duela fue cerrada hasta el tercer parcial, cuando los sudamericanos apretaron las tuercas y se despegaron. Mark Dickel y Kirk Penney fueron los mejores por los neozelandeses con 15 y 11, respectivamente.
El contraparte español de Ginóbili, Pau Gasol, hizo lo posible por mantener su lado del trato. Con 19 puntos y 15 rebotes del centro de los Grizzlies de Memphis, los ibéricos sacaron de escena a una Serbia que se despidió del campeonato mundial que ganó hace cuatro años en Indianápolis.
España presentó otro festival de juego de equipo, con Gasol al volante y José Calderón y Juan Carlos Navarro en el asiento de atrás. Darko Milicic hizo lo posible por mantener a Serbia a flote con sus 18 puntos.
Los españoles ganaron la primera mitad 43-31 y mantuvieron la distancia durante el resto del paseo. Turquía, por su parte, siguió por buen camino y cerró su partido con una racha de 13-3 para enviar de vuelta a casa.
Eslovenia ganaba por cuatro, 81-77, con cerca de tres minutos en el reloj, pero el escolta Serkan Erdogan detonó con dos triples consecutivos y luego encajó cuatro tiros libres en los dos minutos finales para darle la victoria a Turquía. El triunfo lituano ante Italia también tuvo drama sobre el final, gracias a la puntería de Arvydas Macijauskas y los fracasos en el tiro libre de los italianos. Macijauskas encestó diez de sus 15 puntos en el último parcial, e Italia falló ocho de nueve tiros libres en el minuto y medio final para sellar el próximo rival argentino.
