EFE
México, DF.- La banca mexicana, cuyo control pasó hace diez años en un 90 por ciento a manos extranjeras con promesas de modernización, mejor servicio y bajo coste, se transformó en un gran negocio con fuertes comisiones y altas tasas de interés que sigue sin derramar suficiente crédito a la economía.
El Banco de México, la Comisión Económica para América Latina (Cepal), la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) han señalado en las limitaciones que mantiene el sistema bancario en México.
En los primeros seis meses de este año, las instituciones bancarias registraron beneficios netos acumulados por 29.502 millones de pesos (2.682 millones de dólares), cifra casi un 18 por ciento mayor al mismo periodo de 2005, según datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Entre enero y junio de 2006 la banca registró un flujo de ingresos por 56.287 millones de pesos (5.117 millones de dólares) de los cuales 40.162 millones de pesos (3.651 millones de dólares) correspondieron al margen financiero, 13.105 millones de pesos (1.191 millones de dólares) sólo por comisiones, y el resto por otros ingresos.
El gobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz, ha insistido en que el problema es que los bancos mantienen altas tasas y comisiones porque el mercado ha mantenido su crecimiento las entidades no han tenido que competir entre sí por los clientes.
Por su parte, el director de estudios de mercado de la Condusef, Marco Carrera Santacruz, explicó que los bancos obtienen grandes ganancias sin mayores esfuerzos por lo que ?no harán nada para cambiar si están bien así?.
Carrera afirmó que se esperaba que los grupos extranjeros superaran las deficiencias, trajeran beneficios al sistema financiero y a los usuarios pero ?la opinión pública no comparte la visión de que haya una mejoría?.
Por su parte, la Cepal explicó en un estudio que la banca en manos extranjeras no ha traído los beneficios que se esperaban, en particular sobre los altos costos de intermediación bancaria que impiden el ingreso de nuevos competidores financieros y no financieros.
En el estudio ?Competencia Bancaria en México? afirman que hay elementos que hacen pensar que los bancos han fijado de manera coordinada tarifas altas a los usuarios.