ENTREVISTA| SI IRAK SE DEJA EN MANOS DE TERRORISTAS, SE COVERTIRÁ EN REFUGIO PARA PLANEAR ATAQUES: RUMSFELD.
Un camarógrafo de la AP fue asesinado por insurgentes cuando cubría enfrentamientos en la ciudad de Mosul.
AP
BAGDAD.-Presuntos insurgentes detonaron el martes dos bombas en una plaza del centro de Bagdad donde numerosos iraquíes buscaban trabajo; 71 personas murieron y otras 200 resultaron heridas, informó la policía.
El ataque sincronizado en la Plaza de Tayaran ocurrió a las 7.00 de la mañana e involucró a un automóvil estacionado y a un suicida que iba en un microbús, aparentando buscar a trabajadores para su contratación. El conductor detonó su cargamento de explosivos cuando los trabajadores se aproximaron a su vehículo, dijo el teniente policial Bilal Alí Majid.
Las explosiones simultáneas, que ocurrieron a unos 30 metros de distancia entre sí, destrozaron las vitrinas de varios comercios cercanos, e incendiaron al menos 10 vehículos más.
Al menos 71 iraquíes, incluidos siete policías, perecieron en el ataque, mientras que aproximadamente 200 personas resultaron heridas, dijeron el teniente policial Bilal Alí Majid y el capitán Mohammed Abdul-Ghani.
Alí dijo que la mayoría de las víctimas eran shiies procedentes de zonas humildes de la capital, como Ciudad Sadr.
"En la primera explosión, vi cómo caía gente por todas partes, algunas de ellas destrozadas. Cuando estalló la otra bomba segundos después, me arrojó contra la pared de mi comercio y me desmayé", dijo Khalil Ibrahim, un comerciante de 41 años. Fue entrevistado en un hospital local donde ingresó para ser tratado de las heridas causadas por la metralla en la cabeza y espalda.
Cuando sobrevino el atentado, la policía de un retén cercano hizo disparos aleatorios en distintas direcciones, pero los residentes corrieron hacia la zona devastada para ver si habían resultado heridos sus familiares o amigos.
En una zona, los cadáveres fueron amontonados junto a la carretera y se les cubrió parcialmente con papel. Dos iraquíes sentados en una acera cercana lloraban y se cubrían el rostro con las manos.
"El conductor del microbús atrajo a la gente para contratarla como jornaleros, y después de que se reunieron, detonó el vehículo", dijo otro testigo, Alí Hussein.
El primer ministro Nuri al Maliki, miembro de la mayoría shii, atribuyó el atentado a "saddamistas y takfiris" (los extremistas suníes).
"Condenamos este horrible crimen y las fuerzas de seguridad de Irak perseguirán a los criminales y los entregarán a la justicia", indicó el primer ministro en una declaración.
En Bagdad, donde muchas personas están desempleadas, numerosos iraquíes se concentran en la plaza en la mañana, a la espera de microbuses o automóviles, cuyos conductores llegan a la zona en busca de contratar a jornaleros para obras de construcción, limpieza o pintura. Cerca, se instalan pequeños comercios para vender desayunos a los jornaleros.
Asesinan camarógrafo
Un camarógrafo que trabajaba para la división de televisión de The Associated Press fue asesinado el martes por insurgentes cuando cubría enfrentamientos en la ciudad de Mosul, informó la policía.
Aswan Ahmed Lutfallah, de 35 años, se encontraba en un taller mecánico en el sector oriental de la ciudad, reparando su auto, cuando comenzó una balacera entre los insurgentes y la policía en la vecindad y fue a cubrirlo, indicó el brigadier policial Abdul-Karim Ahmed Khalaf.
Al verlo filmando, un insurgente se le acercó y le disparó, según el informe preliminar que dio Khalaf.
No se tenía conocimiento de que pesase amenaza alguna sobre Lutfallah, quien trabajaba con la AP en Mosul desde el 2005. Le sobreviven su esposa, Alyaa Abdul-Karim Salim, un hijo de seis años y una babé nacida este año.
Lutfallah es el segundo camarógrafo de AP que muere en Mosul en 21 meses.
Refugio de terroristas
Si se deja a Irak en manos de los terroristas, el país se convertirá en un refugio para planear ataques contra países vecinos moderados y contra Estados Unidos, advirtió el secretario estadounidense de Defensa saliente, Donald Rumsfeld.
En entrevista publicada por el diario español ABC, Rumsfeld indicó que las consecuencias de dejar la situación de Irak en manos de los terroristas serían graves, no sólo por el petróleo, el agua, la riqueza, la ubicación geográfica y la población.
Además, sostuvo, porque el país se convertiría en refugio para planear ataques contra los países moderados de la región y contra Estados Unidos, lo cual disminuiría capacidad a esta nación para ofrecer protección a su pueblo.