El presunto responsable confiesa su crimen; utilizó una barra metálica con un peso aproximado de ocho kilos para asesinar a su víctima
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Como un sujeto violento, agresivo y con problemas de alcoholismo, fue calificado el probable homicida del velador ultimado la noche del martes cuatro de julio. El inculpado ya fue detenido y confesó su crimen.
Francisco Javier Marín Ayala, de 34 años de edad, fue presentado como el sujeto que presuntamente privó de la vida a Ángel Carrizales López, de 64 años de edad, alias ?El Tintino?.
Homicidio simple doloso es el delito por el cual será consignado ante la autoridad judicial el implicado en el asesinato que dijo tiene su domicilio en la calle privada Cerro de la Estrella número 486.
Una barra metálica de aproximadamente 1.20 metros de longitud, con un peso aproximado de cinco a ocho kilogramos, fue el arma homicida asegurada en la escena del crimen.
El cuerpo del velador tiene marcas de metal en el tórax que le provocaron el estallamiento de diferentes órganos vitales así como la destrucción del rostro al encajarle la barra en un ojo.
Sobre los hechos el acusado indicó que desde temprana hora llegó al taller de herrería ubicado en la calle Iztacalco 484, de la colonia Tierra y Libertad para tomar cervezas como comúnmente lo hacía.
Después llegaron Humberto Pulido Lozano, de 24 años alias ?El Pin? y Mauro Jesús Elizalde Rivas, de 26 años de edad, alias ?El Chuy? que también estuvieron tomando.
En el taller estaba el hijo del dueño, identificado como Ángel Olvera López, quien salió para traer la cena del velador como cada noche.
?El Pin? y ?El Chuy? ya se habían retirado del lugar y sólo quedaron Javier y el finado. Dicen los dos sujetos que durante el tiempo que estuvieron conversando hablaban de autos y ?El Tintino? descalificaba los comentarios de Francisco Javier.
También se dio a conocer que no era la primera vez que Marín Ayala golpeaba a su anfitrión, ya que en tres ocasiones anteriores hubo problemas, y lo que hacía el velador era sólo correr a sus invitados.
Servicios Periciales de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) aseguraron prendas de vestir del inculpado. Sus botas, una camisa de manga larga de mezclilla azul, y un sombrero café, que tienen residuos de sangre de la víctima.
La intervención de la Policía Ministerial permitió la captura del probable responsable y la agente del Ministerio Público, Liliana López de la Cruz, está por consignar al señalado ante el Juzgado Quinto del ramo penal.
