El Siglo de Durango
Agentes de la Dirección Estatal de Investigación (DEI) detuvieron a dos personas que sospechosamente traían un bolso de mujer, por lo que al hacer la revisión de rutina se encontró que la habían sustraído del interior de un vehículo estacionado y que uno de ellos contaba con una orden de aprehensión por robo.
Se trata de los hermanos Tomás y Felipe Salcido Soto, de 28 y 30 años de edad, respectivamente, quienes tienen su domicilio en la colonia Jardines de Cancún.
Estos sujetos, al ser interrogados por la posesión del bolso que contenía 700 pesos en efectivo y documentos varios a nombre de Martha Leonor González, coincidieron en que lo habían encontrado tirado en la vía pública.
Sin embargo, en esos momentos la propietaria del bolso se encontraba interponiendo una denuncia por el delito de robo ante la Dirección de Averiguaciones Previas (DAP), en la cual declaró que le extrajeron su bolso de mano que contenía, además de documentos, mil 100 pesos en efectivo.
Después de la evidencia, los consanguíneos confesaron la autoría del robo, e inclusive declararon que habían gastado los 400 pesos restantes. El ilícito lo cometieron en una de las calles de la Zona Centro y por ello ambos se encuentran a disposición de la autoridad correspondiente y Felipe tendrá que llegar hasta el juez para que responda por la denuncia formal que presentaron en su contra.
Regresan lo robado
A disposición de la Dirección de Averiguaciones Previas se encuentran César Iván Ávila Ayala, de 23 años de edad, y Mario Alberto García Ibarra, de 20, después de que fueron denunciados por robo en interior de vehículo.
La denuncia fue presentada por Juan Antonio Tinoco Torres, a quien le habían sustraído de su vehículo marca Nissan, tipo Tsuru, modelo 1998, de color verde con blanco, un taxímetro, con un valor de mil 500 pesos, la carátula del estéreo, 400 pesos en efectivo y ocho discos compactos.
Estos sujetos quebraron uno de los vidrios del carro para lograr su objetivo; sin embargo, fueron vistos el momento en que cometían el ilícito, por lo que se presentó la denuncia directamente en su contra y al momento de la detención regresaron todo lo que se habían robado, a excepción del dinero.
