El tenis ruso femenil se encuentra entre el éxito y las rencillas
EFE
Madrid, España.- La irrupción del tenis ruso en el circuito femenino ha inundado de logros el palmarés particular de cada una de sus jugadoras y ha disparado la cosecha global del país gracias a una rentable situación deportiva que ha derivado, sin embargo, en diferencias notorias entre las protagonistas que copan la parte alta del ranking de la Asociación Femenil de Tenis (WTA, por sus siglas en inglés).
Un claro ejemplo es el Sony Ericsson Championships que por primera vez acogerá Madrid, desde hoy martes, hasta el próximo domingo. En la cita se reúnen las ocho mejores jugadoras del mundo. Y de ellas la mitad son rusas.
Lejos de globalizar un éxito que irrumpió definitivamente hace dos años, cuando tres de los cuatro Grand Slam fueron ganados por raquetas de Rusia -Maria Sharapova conquistó Wimbledon, Anastasia Myskina venció en Roland Garros y Svetlana Kuznetsova el Abierto de los Estados Unidos en la final contra su compatriota Elena Dementieva-, cada una hace la guerra por su lado.
El tenis ruso ha rentabilizado su camada con los triunfos en el 2004 y el 2005 en la Copa Federación. Sin embargo, las diferencias afloraron en este curso, tras la derrota en primera ronda frente a Bélgica.
?En Rusia estamos acostumbradas a luchar por cualquier cosa?, argumentó Svetlana Kuznetsova, una de las cuatro representantes de Rusia junto a Maria Sharapova, Elena Dementieva y Nadia Petrova.
?Es evidente que hay problemas entre las jugadoras rusas fuera de las pistas. Porque hay una competitividad enorme y eso lleva a algunos piques. Hay mucha rivalidad, es innegable y es difícil ser amigas fuera de la cancha. Sin embargo, yo me llevo bien con la mayoría de ellas?, indicó la tenista de San Petersburgo, de veinticuatro años.
El resto de jugadoras no fue tan evidente como la cuarta raqueta del circuito. Sharapova ni siquiera entró en el asunto. Está por encima del resto. En otros asuntos más allá de la competición. Petrova, sin embargo, señaló que la situación subraya ?el talento individual de cada jugadora de Rusia. Es evidente que cuando juegas con otra tenista rusa hay una competitividad especial?, indicó.
?Estaría muy bien una final entre dos tenistas rusas porque sería la primera vez en la historia de un Masters que sucedería?, concluyó.
Elena Dementieva calificó la situación como ?especial?. La moscovita de veinticinco años tiene motivos para padecer una ?envidia sana? de sus adversarias. Dos compatriotas -Elena Myskina y Kuznetsova- le apartaron en el 2004 de la gloria de un Grand Slam en las finales de Roland Garros y el Abierto de Estados Unidos.
?Algunas nos conocemos bien y tenemos buena relación de la competición de la Copa Federación. No creo que entre nosotras haya un mal ambiente. Creo que, en general, nos llevamos bien?, indicó Dementieva, que ensalzó la figura de Sharapova, a la que, como el resto, consideran la favorita para la conquista del último título del año.
