El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- De varios años para acá Harrison Ford ha desperdiciado su carrera en tediosos thrillers e insípidos dramas. Después de todo, el actor está simplemente aprovechando la gran fama que ganó en algunas películas (predominantemente la trilogía de Star Wars y la de Indiana Jones) para hacer dinero por carretadas, sin aspiraciones artísticas y sin riesgos creativos.
Y es que a lo largo de los últimos quince años, se la ha pasado interpretando siempre al mismo personaje (estoico hombre de familia que encuentra valor para sobreponerse a alguna desesperada situación, siempre convirtiéndose en un héroe que no le pide nada a un Rambo o similar prototipo) en películas con argumentos demasiado blandos y realizadas sin ambición narrativa alguna.
La lista es muy larga y por motivos de espacio pondré las más significativas para identificar este síndrome que le ha dado a Ford: Juego de Patriotas (Philip Noyce, 1992), El Fugitivo (Andrew Davies, 1993), Peligro Inminente (Philip Noyce, 1994), Enemigo Íntimo (Alan J. Pakula, 1996), Avión Presidencial (Wolfgang Petersen, 1997), Revelaciones (Robert Zemeckis, 2000) y un sin fin de más cintas.
No es raro pues que, Firewall, la más reciente de la larga lista, se ajuste exactamente a los parámetros establecidos por sus convencionales predecesoras, de plano no hay nada nuevo por descubrir en el nuevo proyecto del senil héroe de acción.
La trama sigue a Jack Stanfield (Harrison Ford), devoto padre de familia y hábil experto en seguridad, que es víctima de una extorsión: el villano Bill Cox (Paul Bettany) y sus cómplices han secuestrado a su familia y, a cambio de su libertad, exigen a Jack que encuentre el modo de violar los sistemas de seguridad que él mismo diseñó, para robar millones de dólares de la institución bancaria donde trabaja. Jack no tiene más remedio que seguir las órdenes de los criminales y, arriesgándolo todo, se dispone a efectuar el robo bajo la mirada misma de sus empleadores.
Los aficionados al thriller moderno encontrarán terreno bien conocido en este film, cuya máxima ambición parece ser reciclar personajes, situaciones y conceptos que hemos visto hasta la saciedad en otras películas, toda esta falta de originalidad se podría disculpar sí la ejecución o energía de la cinta redimieran su falta de inspiración. Pero o sorpresa, esto no sucede y en cambio pretende sorprendernos con giros absolutamente estúpidos y hasta risibles, especialmente durante el final.
En la historia se hace gala de jerga técnica y forzadas situaciones para generar suspenso artificial, falso y deshonesto. Además, al estar dirigida al público familiar, no puede realmente llegar a extremos estilísticos o dramáticos que quizás podrían darle interés adicional. Vamos, ni los aficionados a los efectos especiales pueden esperar algo rescatable en esta cinta, que es lo que muchas veces le da puntos a una mediocre película, sus efectos especiales, aquí son prácticamente nulos.
Y es que en verdad, si no vemos Firewall no pasa nada, inclusive podemos saber todo lo que pasa en la trama sin siquiera haberla visto, con saber la pura premisa sabemos hacía donde va dirigida.
Ni las actuaciones la salvan, por que como dije, Harrison Ford entrega uno más de sus papeles convencionales, los cuales no le cuestan ningún trabajo interpretar, y lo único diferente de éste filme, con otros del actor, son los cambios de quién interpreta a su familia y a los villanos, que al fin de cuentas son totalmente olvidables.
En conclusión, el argumento que se cuenta es totalmente genérico, no cuenta absolutamente nada diferente, es la misma historia de cientos de thrillers que se han hecho, además el desarrollo que aquí se plantea es insípido y acartonado, es una lastima que películas como esta sigan teniendo la atención del público, por que mientras las sigan viendo, Holywood, los productores y Harrison Ford, las seguirán haciendo.
Título original: Firewall.
Elenco: Harrison Ford, Paul Betany, Virginia Madsen, Robert Patrick, Robert Forster, Alan Arkin.
Director: Richard Loncraine.
Calificación: **
En dos palabras: insípida y olvidable.
Mínimo * Máximo*****