El conjunto futbolístico vestido de verde y que representa a México es, por obra y gracia de nuestros directivos, un simple club de cuates.
Exactamente como en una vieja historieta llamada La Pequeña Lulú, en la cual un gordito simpático, bonachón y que vestía de marinerito tenía una cofradía para puros hombres, llamado el Club de Toby. Ricardo La Volpe posee en el Tri su propio círculo de amigos a los que puede convocar donde y cuando quiera.
En uno de los últimos ensayos serios previos a la Copa del Mundo, el estratega argentino llamó a jugadores como Claudio Suárez, indiscutible en su jerarquía pero fuera de nivel competitivo y cuya tardía convocatoria podría asegurarle un lugar en la lista definitiva. ?El Emperador? es el jugador mexicano con mayor número de apariciones en encuentros oficiales de la selección nacional; es igualmente un histórico referente en los clubes para los cuales ha jugado y además se trata de un excelente ser humano, sólo que la selección no es un concurso de popularidad, y mi querido Claudio dista, por edad y nivel de juego, de tener los merecimientos para representar a México en la justa veraniega.
Convocó a Rafael García, quien, independientemente de carecer incluso del status de titular en el Atlas, resulta que es su yerno; esto coloca al entrenador en la incómoda tesitura de hacer cosas buenas que parecen malas. La idea de incluir de última hora al ?Chiquis? en el Tri para que pueda tener la oportunidad de disputar un sitio en la lista final parece responder a presiones familiares y en buen castellano se llama nepotismo. También trajo a esta última llamada al defensor americanista Duilio Davino, quien, al igual que Suárez, dista años de tener el nivel que alguna vez tuvo. Incluso el gol paraguayo deriva de un error cometido por el zaguero águila.
La Volpe sigue de necio llamando a Daniel Osorno, a quien ni siquiera alineó, al ?Maza? Rodríguez que en cada partido regala al rival una oportunidad de gol por lo menos, y que parecen inamovibles de la lista definitiva.
Lo único que ha quedado claro en estos tres años que Ricardo La Volpe ha dirigido a la selección es lo siguiente:
1.- El famoso ?proceso? de reclutamiento y visoría de los jugadores ha sido una tomadura de pelo, pues a 70 días del Mundial de Alemania 2006 sigue haciendo experimentos.
2.- Según el número de jugadores convocados, casi la totalidad de los futbolistas mexicanos poseen el nivel para estar en el Tri pues un centenar de ellos han vestido la camiseta verde.
3.- Su supuesta apuesta por la juventud será un mito si lleva a gente como Cuauhtémoc Blanco, Óscar Pérez y el multicitado Claudio Suárez.
4.- Nadie es capaz en la federación de frenar al argentino que cree que la selección es de su propiedad.
5.- El próximo domingo debemos estar preparados para sorpresas pues La Volpe no dará a conocer la lista definitiva de la selección nacional, nos informará quiénes serán los cuates que lo acompañen a Alemania.
Tan siquiera Toby era simpático.