Los habitantes de Las Playas pelean por la poca agua que les llevan en pipas
EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Si antes tenían poca agua sólo por las madrugadas, desde hace una semana los pobladores del ejido Las Playas no cuentan con una gota del vital líquido y durante este lapso sólo dos pipas han acudido para llenarles dos tambos de agua por casa. La escasez del líquido provoca que los habitantes disputen por él.
Algunos de los 290 habitantes de la citada comunidad manifiestan que dicha cantidad de agua no es suficiente para las actividades diarias como es la preparación de alimentos, higiene personal y para mitigar la sed, en particular de los infantes. Ante esta situación quienes tienen las posibilidades suelen acudir a ejidos vecinos a pedir agua, mientras el resto raciona el vital líquido.
?El sábado se cumplió una semana que no tenemos agua, ahora tienen tres días que no vienen las pipas, pues la última vez que estuvieron por aquí fue el jueves y llenaron los dos tambos que dan por casa, pero ya se está acabando?, comentó Alberta Ramos Córdova, una de las vecinas afectadas por la falta de agua potable en el ejido Las Playas.
?Si antes no teníamos agua, ahora mucho menos, antes como quiera salía agua en otras casas y nos la convidaban, pero ahora nadie tiene agua y los que pueden, que tienen mueble, la traen de los demás ranchos, pero los que no tienen en qué traer se tienen que aguantar?, precisó Elvira Favela Rivas, habitante de la citada comunidad.
Hasta el momento, los habitantes de la citada población desconocen cuándo habrá de resolverse el problema del abastecimiento del agua, pues se requiere de reponerse al menos 190 metros lineales de tubería del Sistema Descentralizado de Agua Potable y Alcantarillado Rural (Sideapar). Lo anterior derivado de los trabajos de desmonte que emprendió el presidente del comisariado ejidal Emilio Luna Munguía, en terrenos localizados a la entrada del ejido para la construcción de 20 viviendas.
La situación por la que atraviesan los pobladores del ejido Las Playas se agrava, pues según establece Daniel Rivas, al momento de llegar las pipas con agua suelen generarse reclamos entre los habitantes, ante la disputa por obtener mayor cantidad de agua potable para sus actividades cotidianas, por lo cual considera que pueda generarse una confrontación.
ASUME RESPONSABILIDAD
El presidente del comisariado ejidal, Emilio Luna Murguía, asumió su responsabilidad en el problema generado con la destrucción de la tubería del Sideapar, pero justifica su acción al señalar que realizó estos trabajos por el beneficio de la población, pues la diputada Leticia Herrera los apoyará con la mitad del costo de construcción de 20 pies de casa.
?Nosotros no desconocemos el error de nosotros, pero como los terrenos son del ejido, por qué debemos andarle informando lo que vamos a hacer. Vamos a tratar de construirlas (las casas) porque la señora Lety Herrera va a dar la mitad, va apoyarnos, es un programa de pie de casa?, comentó Luna Murguía en torno a la presunta demanda que presentará el área jurídica en su contra por los daños a la infraestructura y la cual tiene un costo de 15 mil pesos.
A escasos 50 metros de distancia de donde se localizan las líneas de conducción de agua vive Manuel González, quien labora como operador de rebombeo del organismo descentralizado y quien manifestó desconocer de los proyectos de la construcción de viviendas nuevas, así como de desmonte y el uso de la maquinaria con la cual se dañó la tubería.
Tanto Luna Murguía como Manuel González, se señalan mutuamente como responsables, pues aseguran que cada uno tiene conocimiento pleno de la ubicación de las tuberías que alimentan de agua potable al poblado. Sin embargo, el primero establece que el operador del rebombeo no quiso participar en el proyecto, mientras que el segundo dijo ?yo no sé nada, eso que hicieron a mí no me tomaron en cuenta, no estábamos enterados ni de las casas ésas que dicen?, señaló Manuel González.
