Reconoce Bruno César que actuó sólo
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Bruno César se echó la culpa. Ante el Ministerio Público reconoció que actuó sólo a la hora de cometer el homicidio contra su entrenador de box y que incriminó a su cuñado Juan Arturo porque estaba molesto. Ahora el primer joven enfrentará cargos por homicidio calificado mientras que el segundo fue exento de responsabilidad.
David Cázares Juárez, delegado de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), informó sobre el giro en las investigaciones para esclarecer el crimen de José Guadalupe García Araujo, de 52 años, ex boxeador y entrenador del gimnasio Apolo en el ejido La Unión.
Fue durante la reconstrucción de los hechos cuando el personal de la PGJE asignado a la investigación del caso, detectó incongruencias en la narración de Bruno César Ramírez Martínez, de 22 años, quien asistido por el abogado defensor de oficio, sostuvo su participación.
Manchas de sangre en el lavamanos del baño de los hombres coincidió con la sangre tipo B del señalado, quien luego dijo que se cubrió la mano izquierda herida con una camisa y se puso a desordenar la oficina para simular un robo.
Sobre el motivo por el cual involucró a su cuñado Juan Arturo Macías Sandoval de 17 años, dijo que con anticipación le había manifestado su deseo de matar a su entrenador de box y le pedía que lo acompañara en reiteradas ocasiones.
La mañana del martes siete de marzo, Bruno César pasó antes de las 7:00 horas a la casa de su cuñado, pero éste le dijo a su madre que lo negara. Horas después Bruno César le dijo a Juan Arturo que ya había matado al ?Zurdo García? pero el joven no le creyó.
Mediante el informe de terceras personas sobre el homicidio de José Guadalupe, fue cuando Juan Arturo se atemorizó y optó por no salir de su casa, situación contraria de Bruno César, quien se vistió de negro para acudir a la velación y funeral de su mentor.
Cázares Juárez indicó que el móvil del crimen se centró más en los supuestos malos tratos que le daba García Araujo a su pupilo, a quien llevaba a pelear a Ciudad Juárez y en el último combate acabó derrotado y fue motivo de burla y humillación constante.
Ambos jóvenes fueron ubicados en Gómez Palacio por agentes de la Policía Ministerial la noche del miércoles ocho de marzo y fueron presentados a los medios de comunicación a las 11:00 horas del jueves nueve de marzo.
Durante las horas posteriores que formaron parte de la investigación, se detectaron las incongruencias en los dichos de Bruno César y más tarde acabó aceptando su plena responsabilidad, que fue tomada en cuenta en la integración de la averiguación previa. Hasta el mediodía del viernes diez de marzo, ambos jóvenes seguían en calidad de presentados en la PGJE a disposición del Ministerio Público. Horas más tarde se decretó que Juan Arturo no tenía participación y pudo abandonar el edificio. No quedó libre porque según las autoridades nunca estuvo detenido.
Cázares Juárez informó sobre la situación legal de Bruno César que seguía en calidad de presentado y que se solicitaría la orden de aprehensión por el delito de homicidio calificado con la agravante de la brutal ferocidad.
Cuestionado sobre la procedencia de la legal retención del implicado en el crimen y el descarte en ese momento de una orden de arraigo, el delegado de la PGJE consideró que ya era suficiente la información proporcionada y dio por terminada la entrevista.
El Código de Procedimientos Penales del Estado de Coahuila señala que sólo se puede retener a un inculpado por flagrancia, causa urgente o mediante arraigo, y por otra parte señala que si el implicado está confeso, puede participar en todas las diligencias (declaraciones, reconstrucciones, pruebas) siempre asistido por su abogado o el defensor de oficio.
La muerte
José Guadalupe García Araujo, de 52 años, ex boxeador y entrenador del gimnasio Apolo en el ejido La Unión, murió acribillado con un cuchillo cebollero. Uno de sus alumnos es señalado como el probable autor de los hechos.
El crimen se cometió la mañana del martes siete de marzo en el segundo piso del gimnasio ubicado en las calles Desarrollo y Esperanza del citado poblado. El hombre fue victimado por la espalda y recibió 26 puñaladas.
?Zurdo García?, como se le conocía al peleador retirado, tenía su domicilio en el andador 34 número 229, todos en la colonia Fidel Velásquez. Su verdugo, Bruno César Ramírez Martínez, de 22 años vive en la calle Fernando Amilpa 483 de la misma colonia en Gómez Palacio.
El homicidio ya estaba planeado y a temprana hora del martes, el implicado tomó un delgado y afilado cuchillo de su casa, y luego se fue al ejido donde sabía que ya estaba su víctima. Durante el crimen el joven se hirió la mano izquierda y esa lesión alertó a las autoridades que al final lo pusieron en la escena del crimen.